Estimado licenciado Marroquín Godoy:
Con las muestras de mi distinguida consideración, atentamente me dirijo a usted con el ruego de que si para ello no tiene ningún inconveniente, se sirva considerar la aclaración de la nota que en seguida refiero:
En el periódico La Hora, que usted dirige de fecha 6 de julio en curso, página 9, título «La Educación se Obtiene en Casa» del reportero í‰dgar Hernández, se refiere a mi persona como ponente de una iniciativa de ley, que propone un Código de í‰tica Parlamentaria para regular la conducta jurídica y política de los diputados al Congreso; pero comenta que el -5 de julio- «…Sin embargo, ayer se le observó en su curul realizando un dibujo mediante el cual se burlaba del reciente actuar de su compañero Mario Taracena, lo cual contrasta con lo que Flores pretende que se apruebe en el Congreso, …», (SIC) lo que es una mentira, que el reportero pretende destacar impersonalmente, como si él y terceros hubieran visto semejante aberración de mi parte. Por mi honor y por la seriedad que me caracteriza, puedo asegurarle que no me burlo de semejante manera de ninguna persona, menos aun de un diputado como el licenciado Mario Taracera Diaz-Sol, quien merece mi respeto como dignatario de la Nación y representante del pueblo.
El dibujo a que alude el reportero í‰dgar Hernández fue distribuido por uno de los ujieres del Congreso en todas las curules, limitándome solamente a observarlo sin comentario alguno con terceros, como lo testifica las tomas de televisión de algunos de los noticieros que se exhibieron ese mismo día, de manera que huelga todo comentario como el que refiere el reportero en relación con las motivaciones del Código de í‰tica que he propuesto.
Agradecido por el favor de su atención, reiterándole mi respeto, me suscribo de usted seguro servidor,