Tifón deja más de 100 muertos en Filipinas


inter_5A

Uno de los tifones de mayor fuerza de que se tenga registro causó la muerte a más de 100 personas y dejó un centenar de heridos en la región central de Filipinas antes de desplazarse hoy hacia Vietnam con vientos de una potencia capaz de destruir viviendas y arrancar árboles.

inter_5B

Por OLIVER TEVES y TERESA CEROJANO MANILA /Agencia AP

El capitán John Andrews, subdirector de la Autoridad de Aviación Civil de Filipinas, dijo que había recibido «información confiable» de su personal que describía la muerte y destrucción que sembró el tifón Haiyan en Tacloban, ciudad de la isla de Leyte, a 580 kilómetros (360 millas) al suroeste de Manila, donde la tormenta tocó tierra el viernes.

Dijo a The Associated Press que más de 100 cadáveres yacían en las calles y 100 personas resultaron heridas.

Indicó que los mensajes que enviaban las autoridades de aviación civil de Tacloban hacia la capital los efectuaron mediante otro aeropuerto en el centro de Filipinas una vez cada cinco horas a fin de conservar baterías en la radio.

La estación de televisión filipina GMA informó que un equipo de periodistas vio el viernes once cadáveres, entre ellos el de un niño, en una playa y otros 20 en un muelle de Tacloban, horas después de que el tifón azotó la ciudad costera.

Por los menos otros 20 cadáveres fueron trasladados hasta una iglesia cercana al pueblo de Palo, la cual había sido usada como centro para damnificados pero que tuvo que ser abandonada cuando el techo lo arrancó el vendaval, dijo la cadena de televisión. Las imágenes trasmitidas por la televisión mostraban cómo soplaba el viento mientras arrancaba techos de láminas de metal durante la lluvia torrencial.

El fuerte viento derribó grandes ramas y arrancó varios cocoteros. Se vio a un hombre que cargaba el cadáver de su hija de seis años que se había ahogado, y se vio imágenes de vehículos apilados entre los escombros.

Casi 800.000 personas se vieron obligadas a huir de sus casas y se cree que los daños son extensos.

Los meteorólogos dijeron que cuando su vórtice tocó tierra, Haiyan tenía vientos sostenidos de 235 kph (147 mph) y ráfagas de 275 kph (170 mph) cuando tocó tierra. Eso lo hizo el tifón más potente en lo que va del año, comparable con un huracán de categoría cuatro de una escala de cinco.

Huracanes, ciclones y tifones son básicamente lo mismo. La diferencia de nombre radica en el lugar del mundo donde se producen.

Los vientos sostenidos del tifón se debilitaron el sábado a 175 kph (109 mph) con ráfagas de hasta 210 kph (131 mph) mientras el fenómeno se alejaba del archipiélago de Filipinas en dirección hacia Vietnam.

Los medios estatales en Vietnam informaron que varias provincias centrales comenzaron a evacuar a unos 300.000 habitantes hacia las zonas más altas. Se prevé que el tifón toque tierra en la región central en la madrugada del domingo.

Debido a la interrupción de las comunicaciones, hasta el sábado era imposible precisar la cifra exacta de víctimas y los daños. Oficialmente, cuatro personas estaban reportadas como muertas hasta el viernes por la noche, antes de que se conocieran los reportes de Tacloban.

El gobernador de Leyte del Sur, Roger Mercado, dijo que el tifón causó aludes de tierra, los cuales bloquearon carreteras, arrancaron árboles y dejaron sin tejado muchas de las viviendas cerca de su propia residencia.

La nubosidad copiosa y las lluvias torrenciales hicieron que el día se tornara casi tan oscuro como la noche, agregó.

«Ante semejante escenario, sólo se puede rezar, rezar y rezar», dijo Mercado a The Associated Press por teléfono. Agregó que los alcaldes de la provincia no habían llamado para reportar más daños.

«Espero que eso signifique que no les pasó nada y no al revés», insistió. «Mi peor temor es que haya habido una pérdida masiva de vidas y bienes».

Eduardo del Rosario, director de la oficina de respuesta a emergencias, dijo que la velocidad a la que el tifón atravesó las islas centrales —40 kph (25 mph)— ayudó a evitar que su diámetro de 600 kilómetros (375 millas) de nubes lluviosas descargaran demasiada agua como para rebasar los canales. Las inundaciones muchas veces son la causa principal de decesos por los tifones.

Del Rosario agregó que un tifón de fuerza similar que azotó las Filipinas en 1990 provocó la muerte de 508 personas y dejó a 246 desaparecidas, pero esta vez las autoridades ordenaron evacuaciones cautelares y otras medidas para minimizar la pérdida de vidas.