Israel y la Autoridad Palestina expresaron su satisfacción hoy ante la propuesta del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, de realizar una reunión internacional de paz, rechazada por el Hamas y recibida con escepticismo por los analistas de ambos lados.
Los portavoces del primer ministro israelí Ehud Olmert y del presidente palestino Mahmud Abas se apresuraron a aplaudir la iniciativa de Bush.
En cambio, los islamistas del Hamas, criticados enérgicamente por el mandatario estadounidense en su discurso del lunes, la condenaron inmediatamente.
Cinco años después de haber presentado por primera vez su «visión» de dos Estados, uno palestino y otro israelí, coexistiendo en paz, el presidente norteamericano consideró que el mundo podía «hacer más para reunir las condiciones de la paz». También llamó a «realizar una reunión internacional este otoño».
«Los participantes fundamentales en esa reunión serán los israelíes, los palestinos y sus vecinos en la región», afirmó Bush, al anunciar que la misma será presidida por la secretaria de Estado Condoleezza Rice.
Los editorialistas israelíes recibieron esta iniciativa con gran escepticismo.
«Si se comparan los dos discursos pronunciados con cinco años de intervalo por Bush, se observa que la paz en Medio Oriente se parece al horizonte: cuanto más se acerca, más se aleja», sostiene Nahum Barnea, un influyente editorialista del diario Yediot Aharonot (independiente).
En el mismo periódico, otro comentador habla del «canto del cisne» de Bush, quien terminará su segundo mandato dentro de un año y medio.
Ben Caspit, del cotidiano Maariv, considera que se trató «del discurso de la última oportunidad para que Bush pueda aparecer con un mínimo de resultados después de dos mandatos desastrosos».
Sylvan Shalom, ex ministro de Relaciones Exteriores y miembro del Likud (el principal partido de oposición), estimó en la radio pública que el discurso de Bush estaba «sobre todo destinado a ayudar a Ehud Olmert, Mahmud Abas y a Bush mismo ante su opinión pública».
Del lado palestino, Al Quds, el principal diario, es un poco más prudente en su diagnóstico. «El llamado de Bush podría constituir una transformación, pero también podría no serlo, ya que estamos habituados a escuchar hablar de iniciativas, propuestas y conferencias que la mayor parte de las veces no conducen a nada».
Por su parte, el portavoz del Hamas (acrónimo en árabe del Movimiento de Resistencia Islámica) afirmó que «el llamado lanzado por el presidente norteamericano Bush se inscribe en el marco de la campaña estadounidense destinada a obtener respaldos para el presidente Mahmud Abas ante la legitimidad lograda por el Hamas».
«El Hamas reitera su negativa a reconocer la ocupación o renunciar a la resistencia, como quiere Bush», agregó Sami Abu Zuhri, llamando al mundo árabe y musulmán a «apoyar a Palestina ante la cruzada dirigida por Bush».