La prolongada sequía de este año dejó sin maíz y frijol a miles de agricultores en El Progreso, según lo establecido por medio de una encuesta que realizó el personal de 17 instituciones gubernamentales con presencia en este departamento.

Carlos Valdez Chigua, delegado departamental de la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (SESAN), informó que la encuesta se llevó a cabo en los ocho municipios que conforman El Progreso, para establecer la cantidad de familias vulnerables a padecer de inseguridad alimentaria, a raíz de la pérdida de sus cosechas.

En términos económicos se calcula que la pérdida asciende a 10 millones de quetzales y en relación con la cantidad de agricultores afectados se determinó que son 8 mil 295 con pérdida irreparable de sus granos básicos, por lo que necesitarán asistencia alimentaria en calidad de emergencia, informó el delegado departamental del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), Boris Herrera y Valdez Chigua.

Valdez Chigua, quien también preside la Comisión Departamental de Seguridad Alimentaria y Nutricional, en la que concurren representantes de los ministerios de Salud Pública y Asistencia Social, de Ambiente y Recursos Naturales, de Educación, de Desarrollo Social y de Obras Sociales de la Presidencia, entre otros, dijo que en esa entidad se tiene proyectado elaborar y ejecutar un programa integral de atención a estas comunidades.

El propósito es trabajar en coordinación interinstitucional para prevenir la inseguridad alimentaria a través de proyectos productivos diversificados, como vivienda, educación en salud, que incluya planificación familiar, higiene personal y reforestación, entre otros, para superar el asistencialismo.

Para el efecto, se cuenta con experiencias positivas de trabajo en equipos interinstitucionales, aspecto reconocido por miembros de la Unión Europea, que realizaron una visita recientemente, indicó el profesional, quien confía en que la propuesta tendrá aceptación por parte de las autoridades superiores.