La Hermandad Musulmana criticó duramente hoy a las fuerzas armadas por derrocar al presidente islamista de Egipto, comparando su gobierno con el de Adolfo Hitler o el del emperador romano Nerón, afirmaciones que posiblemente azuzarán las tensiones antes de que se efectúen manifestaciones rivales por parte de partidarios y opositores del exlíder.
Las críticas fueron especialmente duras, incluso para los estándares de la Hermandad. El grupo ha efectuado pronunciamientos sucesivos contra las fuerzas armadas en los tres meses desde que Mohamed Morsi, el primer presidente de Egipto elegido en comicios libres y uno de los líderes del grupo durante largo tiempo, fue derrocado en un golpe de Estado apoyado por la población.
Desde su caída el 3 de julio, el gobierno respaldado por los militares del país se movilizó contra la Hermandad: la proscribió, incautó sus activos y arrestó a cientos de sus partidarios.
Las manifestaciones rivales del domingo —ambas programadas en la Plaza Tahrir, en el centro de El Cairo— conllevan el potencial de enfrentamientos violentos entre los partidarios islamistas de Morsi y egipcios que respaldan a los militares.
La fecha también es un feriado nacional, el 40mo aniversario del inicio del conflicto de Oriente Medio en 1973 en el que las fuerzas egipcias lograron avances contra Israel.
«Si la historia mencionará a los comandantes (militares) de 1973 en sus páginas más brillantes, no hay duda de que mencionará a los líderes del golpe sangriento que asesinó a sus hermanos egipcios en la misma página que Nerón, (el líder mongol) Hulagu y Hitler», afirmó el comunicado de la Hermandad.
El texto también exhortó a las tropas egipcias a rebelarse contra sus comandantes y dijo esperar que el domingo representará una «victoria del pueblo sobre los que efectuaron el golpe contra ellos para obtener ganancias personales».
Una agrupación de varias organizaciones islamistas encabezada por la Hermandad emitió un comunicado por separado con exhortaciones similares para que los soldados se amotinen contra sus comandantes, señalando que los militares deben dejar de participar en política para concentrarse en la defensa nacional. La Alianza Nacional de Apoyo a la Legitimidad exhortó a los opositores al golpe a realizar actos en todas las ciudades mañana y converger en la Plaza Tahrir el domingo.
Desde su derrocamiento, Morsi está detenido en un lugar no revelado mientras las autoridades reprimen a la Hermandad. Han detenido a más de 2 mil miembros y activistas, incluidos el líder espiritual Mohammed Badie y su poderoso lugarteniente Jairat el-Shater. Muchos de los detenidos han sido acusados de conspirar con potencias extranjeras, incitar a la violencia, corrupción y asesinato, entre otros cargos.