Hoy hablan de la necesidad de establecer cuotas para la participación política de distintos grupos en Guatemala.
Cuando pienso de la familia, recuerdo que hace años estaba bien establecido su significado y quienes la formaban; hoy, las combinaciones de personas que forman una familia son tan diversas que no sabemos cómo referirnos a familia.
Creo que lo mismo está pasando con el concepto “política” y la participación de las personas en ella. Si la población guatemalteca está formada por dos grupos mayoritarios, siendo estos las mujeres y los jóvenes, ¿cuánta cuota debe tener cada grupo? ¡Oh!, se me olvida que hay otros grupos como los mayores de edad, los adultos mayores, los pueblos que siempre mencionan la cuota que deben tener para que la asignación no sea simbólica. La diversidad en Guatemala es múltiple. ¿Qué significa el término cuota para el uso que están dándole?
Abiertamente soy contrario al sistema de cuotas, especialmente en la participación política, léase en el Congreso de la República, donde nuestros representantes tienen que poder formular (redactar correctamente) y defender (explicar con argumentos correctos) las iniciativas de ley con el bien común como primer principio ético. Eso demanda estudios formales y experiencia para que la persona pueda demostrar lo que hace, los logros alcanzados, la influencia que ha tenido su acción en todo sentido y que haya sido y sea de beneficio para Guatemala. Así se juzga la capacidad de las personas para participar eficiente y honestamente en la política nacional.
Regresemos a la parte más discutida sobre cuotas. Hay muchas mujeres capaces pero la gran mayoría, me atrevo a decir, no participa en política. Hay otro grupo que quiere participar pero no tienen los estudios ni la experiencia necesarios. Si pensamos a largo plazo, es importante dirigir la atención hacia la “formación” y no únicamente al “aprendizaje” mientras participan en el sistema.
Por años he pensado que es propicio establecer un instituto formal para la formación de la mujer en su “role” de líder, no solamente en política sino en toda actividad socioeconómica que se desarrolle en el país. Dicen que existen instituciones pero las que conozco limitan su acción a grupos que simpatizan con determinada corriente política y no generalizan a todas las mujeres.
Creo que la visión de la creación de un ente como el referido, tendría que tener lineamientos como, 1. Promover el liderazgo de la mujer en áreas urbanas y rurales. 2. Dar la oportunidad a todas las mujeres de tener acceso a una educación de alto nivel para poder ejercer ese liderazgo. 3. Proveer una organización de estudio e investigación que sustente las acciones que deben desarrollarse en beneficio de la sociedad guatemalteca. 4. Visualizar a largo plazo lo necesario en una organización que se mantiene actualizada en la formación de mujeres líderes.
Este “Centro de Capacitación” debería institucionalizarse y tendría como misión coordinar con otras entidades para que tenga continuidad a largo plazo y mantenga su filosofía, misión, visión y objetivos.