A mitad de camino entre Flores y la frontera entre Guatemala y Belice, en las costas de la laguna Yaxhá, se encuentra una antigua ruina maya sólo segunda en fama después de la de Tikal.
No solo alberga reliquias increíbles, estructuras y monumentos de una época lejana, sino que también es el hogar de una gran diversidad de vida silvestre, que incluye el cocodrilo moriletti, una versión de la especie, más pequeña y menos entendida.
Mientras que Tikal ha sido excavado desde la mitad de la década de 1800, las glorias y maravillas de Yaxhá han salido a luz solo recientemente. De hecho, la exploración y la restauración de Yaxhá están sólo en su etapa preliminar.
Los visitantes que van a las ruinas y estructuras pueden llegar a tener el placer adicional de poder ver a los arqueólogos trabajando activamente para desenterrar, explicar y preservar los pedacitos del antiguo pasado.
También puede interactuar con estos arqueólogos e historiadores, durante su tour, para poder adquirir un entendimiento más profundo de la historia y tradición mágica de la que fue alguna vez una gran ciudad.
Tomado de www.alfatravelguide.com