Los jefes de la Fórmula Uno creen que los aumentos en los costos de la serie, que empeorarán la próxima temporada, significan que hay algo «fundamentalmente mal» con el deporte.
El cambio a motores V6 turbo el próximo año, además del regreso de las pruebas durante la temporada, significan que equipos que ya están en aprietos económicos tendrán que gastar aún más dinero.
Las negociaciones entre los equipos para implementar medidas para reducir los costos terminaron sin un acuerdo, al no conseguir cerrar la brecha entre los equipos más pequeños y los gigantes Red Bull, Ferrari, McLaren y Mercedes, que resisten las restricciones.
«Cuando llegué a la Fórmula Uno, la gente hablaba sobre reducir los costos, pero no creo que hayan bajado en un solo año», comentó el fundador de Caterham y jefe de la aerolínea Air Asia, Tony Fernandes. «El próximo año será el año más caro, así que hay algo fundamentalmente mal».
«Los equipos perdieron una oportunidad para controlar los costos. Los intereses propios se impusieron por encima del deporte, y tenemos tanta culpa por este problema como el motor (nuevo). Metimos la pata, es así de sencillo».
El dirigente de Toro Rosso, Franz Tost, votó en contra de volver a implementar las pruebas durante la temporada, que originalmente fueron descartadas como una medida para ahorrar dinero y regresan en 2014 a solicitud de los equipos más grandes.
«Los equipos son lo suficientemente estúpidos como para hacer pruebas durante la temporada», criticó Tost. «Por un lado se quejan de que no tienen dinero, y por otro lado lo tiran por la ventana».
«¿Y quiénes quieren las pruebas? Los equipos ricos, como siempre».
El director del equipo Lotus, Eric Boullier, indicó que los costos mermaron comparado con la era de los fabricantes de la última década, cuando titanes como Renault, BMW, Toyota y Honda tenían sus propios equipos.
Sin embargo, pidió más conversaciones entre los equipos, el organismo rector FIA y los dueños de los derechos comerciales, encabezados por Bernie Ecclestone, para estabilizar las reglas sobre los costos.
Bob Fearnley, subdirector de Force India, coincidió que las reglas tienen que venir desde arriba, ya que hay demasiada competencia entre los equipos para lograr un acuerdo.
«Los equipos demostraron que son incapaces de lograr un acuerdo para controlar los costos, así que la solución tiene que venir desde afuera de los equipos. La FIA tienen que decidir una fórmula e implementarla», señaló.