Entendemos que la corrupción se cuida de borrar huellas y por ello no deja de ser sano que aun por cosas pequeñas se pueda perseguir a quienes usan para su propio beneficio los fondos públicos, pero viendo los acontecimientos recientes es importante ver que el Ministerio Público no puede jugar el papel de hacer persecuciones selectivas orientadas a acusar a quienes de alguna manera son objeto de confrontación con las autoridades de gobierno. La captura reciente de personal del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, la acusación en marcha contra el expresidente de esa institución y las detenciones ayer de los trabajadores que estaban tratando de formar un sindicato en el Registro de Información Catastral, no se enmarcan en una batida contra la corrupción emprendida por los fiscales y por lo tanto resultan por lo menos sospechosas.
No pretendemos, ni por asomo, cuestionar que se investiguen delitos grandes o pequeños cometidos por funcionarios y empleados públicos que tengan que ver con corrupción. Por el contrario, La Hora ha sido sin duda el medio más exigente y crítico del papel del Ministerio Público específicamente en esta materia y entendemos que es más fácil encontrar pruebas si un funcionario torpemente usa materiales de construcción de la entidad a su cargo para reparaciones en su casa, que seguir la pista de los millones que les depositan en cuentas en el extranjero por comisiones en compras o en contratos, pero aún esa pista se puede seguir si hay interés.
Lo que nos genera dudas es que con base en delitos grandes o pequeños, misteriosamente avancen únicamente los casos contra quienes están en la mira de las autoridades de gobierno. ¿Cree usted que únicamente Reyes Mayén ha usado recursos públicos para reconstruir su casa o que ningún otro funcionario de alto nivel desvía recursos para fines personales?
Por supuesto que si cualquiera, aunque esté en la mira de las autoridades por rencillas personales, incurre en delito, tiene que ser perseguido, pero la clave de todo está en el término “cualquiera”, lo que significa que la persecución tiene que ser por parejo y general. Entendemos que es importante que el Ministerio Público proceda legalmente cuando hay evidencias de delitos de lesa humanidad, pero nos parece que hay lesa humanidad cuando se roban el dinero que puede mitigar las penas de un pueblo tan pobre que se muere de hambre y al respecto no hacen absolutamente nada más que cuando el sindicado le cae mal o se ganó la enemistad de los gobernantes. Por ello, para evitar que se vea persecución selectiva, hay que actuar parejo contra pasados y presentes actores de la gran corrupción.
Minutero:
Nos parece un exabrupto
carente por completo de gracia
que persigan solo al corrupto
que ya ha caído en desgracia