Miles de personas atendieron hoy el llamado de la Hermandad Musulmana y participaron en las protestas en El Cairo y otras ciudades mientras las fuerzas de seguridad bloqueaban vías importantes y reforzaban sus posiciones.
En una de las marchas más numerosas, unas 5.000 personas lanzaron consignas contra el jefe del ejército, el general Abdul Fatá El Sisi, que condujo el golpe de Estado del 3 de julio que derrocó a Morsi, líder de la Hermandad.
«¡La gente reclama la muerte del asesino!», gritaban los manifestantes mientras exhibían cartelones amarillos con la silueta de cuatro dedos. Los partidarios de Morsi han usado este símbolo en línea y en las campañas callejeras para recordar la protesta pasiva en torno de la mezquita Rabaa el-Adawiya, que en árabe significa cuatro.
Las fuerzas de seguridad despejaron esa protesta y otra hace dos semanas en operaciones violentas que provocaron reacciones violentas. Más de 1.000 personas, en su mayoría opuestas al derrocamiento de Morsi, han muerto desde entonces. El ministerio del interior dice que también han muerto más de 100 policías y soldados.
Cientos de miembros de la Hermandad, incluso altos líderes, han sido arrestados y acusados de incitar a la violencia. La enérgica represión ha debilitado a la Hermandad, que solía ser el grupo político más poderoso de Egipto.
Las calles de El Cairo estaban mayormente vacías el viernes en anticipo de las protestas. Las fuerzas de seguridad bloquearon las principales avenidas con alambrados de púas, tanques y vehículos blindados para impedir que los manifestantes llegaran a la Plaza Esfinge en El Cairo donde la Hermandad convocó a sus partidarios.
Unas 150 personas protestaron pacíficamente frente a una mezquita cerca de la plaza después de las oraciones islámicas del mediodía. Los agentes de seguridad lanzaron dos granadas de gases lacrimógenos al grupo. También lanzaron granadas de gases a unos 3.000 manifestantes en la ciudad de Tanta, en el Delta del Nilo.
Pese a los arrestos masivos, la Hermandad ha podido transmitir su mensaje y organizar marchas por medio de campañas en la red social Facebook.
Antes del inicio de las marchas, la agencia estatal egipcia había reportado que hombres armados no identificados que viajaban en dos vehículos dispararon contra una comisaría de policía en el barrio cairota de Heliópolis y mataron a un agente.
La agencia noticiosa MENA indicó que otro agente y un civil resultaron heridos en el atentado, perpetrado la madrugada de hoy.
La violencia llegó a su peor momento hace dos semanas cuando las fuerzas de seguridad desalojaron dos campamentos de manifestantes de la Hermandad Musulmana.