Un fin de semana, junto a mi familia viajamos a Pana y fuimos a pernoctar a Antigua Guatemala. Pudimos observar en Pana que la mayorí­a de visitantes son turistas extranjeros, o sea de otras nacionalidades, y allí­ cuando usted pretende comprar algún artí­culo tí­pico lo tratan como extranjero y le piden el doble del precio real. Los extranjeros ya están al tanto de esta situación y cuando algún indí­gena les habla en inglés le pretenden cobrar en dólares, pero este no baboso le ofrece la mitad en quetzales. En los restaurantes la bebida y comida están por las nubes y se notan los estragos que causó la tormenta Stan que aún NO HAN SIDO RECONSTRUIDOS. Por la noche del sábado llegamos a la Antigua Guatemala y nos hospedamos en un hotel NO de primera y por tres cuartos triples nos cobraron 56 DOLARES AMERICANOS o su equivalente en quetzales, con derecho a un pequeño snack por la mañana, que NO ES UN DESAYUNO COMPLETO. El domingo por la mañana empezamos a recorrer las ruinas y lo primero que hicimos fue visitar la iglesia San Francisco, donde se encuentran los restos del Santo Hermano Pedro. Por entrar al parqueo de dicha iglesia debe cancelarse cierta cantidad, NO SE SABE SI ES POR PARTE DE LA IGLESIA, de algún particular o de la Municipalidad. En la segunda avenida SUR número 16 entramos en un café donde tienen varias mesas con sus respectivas sillas; EN LA ENTRADA SE LEE íšNICAMENTE CAFí‰; consumimos más de CIENTO CINCUENTA QUETZALES, pues éramos nueve personas, incluyendo hijos, esposas, nietos y hermana; a una de mis nietas le dieron deseos de orinar y le dijimos a quien nos atendí­a si nos permití­a usar su servicio sanitario, la dueña (que se encontraba atrás del mostrador) CON MALA CARA DIJO «NO TENEMOS BAí‘O», pero yo le contesté ¿ENTONCES Dí“NDE HACEN USTEDES SUS NECESIDADES? Me respondió: «lo que pasa es que hay perros muy bravos», entonces le riposté diciéndole AMíRRELOS O enciérrelos. Tuvimos que buscar por todo ese sector un lugar donde la niña pudiera hacer su necesidad (¡!) YO PIENSO QUE LA AUTORIDAD QUE PERMITE ESTOS NEGOCIOS DEBE EXIGIRLES TENER ESE SERVICIO, y la conclusión es que los guatemaltecos cada dí­a estamos más limitados a poder darnos una vueltecita al interior, especialmente lugares turí­sticos, PORQUE LA INFLACIí“N ES DESENFRENADA. ¡Qué tristeza! Los de abajo salimos siempre trasquilados. Otra cosa: han OFICIALIZADO LA PROPINA (?) DOBLE TRIBUTO.