Los niños David Estuardo Pacay Maaz, de 11 años y Ageo Isaac Güitz, de 13, fallecieron en diferentes centros asistenciales de la capital, tras ser heridos en Alta Verapaz el pasado viernes por el “presunto” guardia de seguridad de una hidroeléctrica, Guillermo Bol; los comunitarios retuvieron al sospechoso, quien después apareció muerto.
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Los niños fueron trasladados al Hospital General San Juan de Dios y Roosevelt respectivamente, tras el incidente originado aparentemente por Bol –identificado por la Policía Nacional Civil (PNC)–, quien buscaba al líder comunitario David Chen y al no encontrarlo se enfadó y disparó en contra de los menores de edad.
Según organizaciones de la sociedad civil, el agresor es un “presunto guardia” de una hidroeléctrica y se encontraba bajo efectos del licor cuando disparó en contra de los niños.
El informe de la institución policial refiere que Pacay Maaz y Guitz, presentaban heridas por arma de fuego en la cabeza y en el cuello, respectivamente. Debido a la gravedad de las heridas fueron traslados a la capital donde perecieron en las últimas horas.
En una conferencia de prensa, representantes del Sector de Mujeres, de la Unión Nacional de Mujeres Guatemaltecas (Unamg) y del Comité de Unidad Campesina repudiaron el hecho.
“Expresamos nuestro repudio por el asesinato de dos niños en la Aldea Monte Olivo del municipio de Cobán, Alta Verapaz, que fue perpetrado a manos de una persona que presuntamente está a cargo de la seguridad de la empresa Hidro Santa Rita, que quiere instalar una hidroeléctrica en esa comunidad”, dijo María Dolores de Marroquín, representante del Sector de Mujeres.
La entrevistada agregó, “estamos consternadas y consternados por este hecho que demuestra que tiene que considerarse la opinión de las comunidades y es necesario eliminar de las políticas estatales la imposición de estos proyectos extractivos”.
Las organizaciones exigieron una investigación exhaustiva al Ministerio Público (MP), la defensa a la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) y a la comunidad internacional ser vigilante para que se garanticen los derechos individuales y colectivos de los pueblos.
En otro tema, fue consultado Daniel Pascual, representante del Comité de Unidad Campesina (CUC) sobre el paradero del presunto agresor de los niños, pero respondió, que falleció y “desconocen las circunstancias”.
Por otro lado, se intentó obtener una declaración de representantes de la hidroeléctrica de la localidad, pero no respondieron a las llamadas realizadas.
NIÑOS SEPULTADOS
A través de las redes sociales, se convocó a una caravana de “solidaridad”, que saldría de la Funeraria Galindo de la zona 1. En este lugar estaba el cuerpo del niño David Pacay.
Mientras que el cadáver de Ageo Güitz se encontraba hasta esta mañana en la morgue del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).
La Hora buscó la reacción de los padres de los niños en la Funeraria antes descrita, pero no se encontraban en el lugar; se indicó que no estaban en condiciones de hacerlo.