En He vivido para luchar, el líder histórico de la Revolución Cubana, comandante en jefe, Fidel Castro Ruz, aporta importantes elementos que enriquecen la historia de la lucha del pueblo cubano a partir del asalto al regimiento del Moncada, en Santiago de Cuba, y al cuartel Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo.
\ Carlos Gonzáles \
La carta, fechada el recién pasado 26 de julio, constituye un testimonio que permite interpretar y explicar lo acontecido aquella madrugada del domingo 26 de julio de 1953, el posterior desarrollo de la lucha del pueblo cubano en la Sierra Maestra y su desenlace victorioso.
Vale la pena destacar lo que refiere Fidel acerca de las ideas que influían al Movimiento, el número de asaltantes escogidos, su afiliación política, las experiencias de la historia cubana, el papel de la clase obrera y los sectores comprometidos en la acción, así como lo que en realidad fue aquél movimiento y lo que se logra corregir y aplicar a lo largo de la lucha en la montaña y su culminación victoriosa.
Al respecto, dice que el Movimiento por él encabezado estaba “fuertemente influido por las nuevas ideas que se debatían en el mundo”. Caracteriza lo sucedido el 26 de julio como un hecho “sin duda valeroso y demostrativo de la capacidad de nuestro pueblo para crear y enfrentar a partir de cero cualquier tarea”.
Hace referencia a que los “160 hombres escogidos para la operación fueron seleccionados entre 1,200 con los que contábamos, entrenados entre los jóvenes de las antiguas provincias de La Habana y el este de Pinar del Río, afiliados a un partido radical de la nación cubana donde todavía el espíritu pequeño burgués…, en mayor o menor medida, influía en todos los rincones del país”
Particular importancia tiene la referencia que hace a cómo “la Revolución iniciada el 26 de julio recogió las experiencias de nuestra historia, el espíritu abnegado y combativo de la clase obrera, la inteligencia y espíritu creativo de nuestros escritores y artistas, así como la capacidad que yacía en la mente de nuestro personal científico”.
Al referirse a quienes integraban el Partido Socialista Popular (PSP), el Partido de los comunistas cubanos, Fidel les considera “personas serias y consagradas a Cuba”. El partido de los comunistas cubanos, agrega, “soportaba los avatares del Movimiento Comunista Internacional”.
A continuación destaca lo que fue aquel intento y lo que significaron los combates librados después. Al respecto, dice: “Aquél atrevido intento no fue sin duda un acto improvisado; admito sin embargo –añade–, que a partir de la experiencia acumulada habría sido mucho más realista y más seguro iniciar aquella lucha por la montañas de la Sierra Maestra”.
Refiriéndose a los inicios en la Sierra Maestra, habla de la inexperiencia, el incumplimiento de las instrucciones, la excesiva confianza en el poder de fuego de los expedicionarios, los descuidos en la vigilancia en tierra. En los combates librados después, dice, “todo fue al revés…, el enemigo nunca más nos pudo sorprender”.
La lucha del pueblo cubano por su segunda y verdadera independencia, habría de librarse y coronarse exitosamente en cinco años, cinco meses y cinco días. Se dice fácil. Es el tiempo que transcurre del 26 de julio de 1953 al 1 de enero de 1959.
De la historia, es mucho lo que se puede aprender, estudiar y asimilar. Su estudio es una valiosa herramienta de trabajo que ayuda a enriquecer la experiencia y superar dificultades por escabrosas y empinadas que sean. (Continuará).