Rafael Espada, vicepresidente de la República, anunció que tanto la Vicepresidencia de la República como la Contraloría General de Cuentas –CGC–, ya han interpuesto dos denuncias ante el Ministerio Público (MP), en contra de la empresa encargada de la construcción de la dársena en el puerto de Champerico, Retalhuleu, y así deducir responsabilidades por la mala construcción.
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Espada indicó que la denuncia se debe a que la megaobra no está funcionando como debería ser, al punto que unos 500 pescadores tienen problemas en extraer producto del mar, lo cual les afecta económicamente debido a la mala construcción de la misma, mediante investigaciones sobre el diseño, la construcción y la supervisión y en la cual se invirtieron más de 500 millones de quetzales.
En 2007, durante el gobierno del expresidente í“scar Berger, a través de los Decretos 45-2006 y 33-2007, fue anunciada la construcción de una dársena en el puerto de Champerico, Retalhuleu, una especie de rompeolas que ayudaría a los pescadores artesanales a obtener más ganancias, mejorar el comercio y generar empleo en la región suroccidente del país.
La dársena, una especie de pista que permite que las embarcaciones ingresen y regresen al mar, ha tenido fallas por el azolvamiento de arena, y el oleaje puede provocar algún accidente.