Los ministros de Comercio del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), incluidos sus miembros latinoamericanos Perú, Chile y México, apoyaron hoy las negociaciones multilaterales de la OMC pero anunciaron que estudian la creación de una zona de libre comercio regional.
Los ministros de Comercio de los 21 países que integran el APEC, que representan casi el 50% del comercio mundial, señalaron la urgente necesidad de reanudar las negociaciones de la Organización Mundial de Comercio (OMC) para concluir la ronda de Doha.
Reunidos durante dos días en la ciudad de Cairns (norte de Australia), los 21 países del APEC decidieron subrayar especialmente este tema y emitieron un comunicado separado sobre el asunto.
«Daremos muestras de la voluntad política necesaria y de flexibilidad, y llamamos a otros miembros de la OMC a hacer lo mismo», apuntaron.
El comunicado indicó que se requiere un acercamiento «ambicioso y equilibrado» para concluir exitosamente la ronda lanzada en 2001.
«Esto significa que tenemos que hacer recortes en tarifas industriales y agrícolas que resulten en mejoras reales y sustanciales en acceso a mercados, y en reducciones reales y sustanciales de los subsidios agrícolas que distorsionan el comercio», afirmaron.
Pero los ministros de Comercio también solicitaron la elaboración de un informe para el establecimiento de una zona de libre comercio Asia-Pacífico (FTAAP por sus siglas en inglés).
La representante de Comercio estadounidense, Susan Schwab, indicó que las negociaciones para un FTAAP probablemente se intensifiquen si fracasa Doha.
Los ministros hicieron hincapié en que Doha sigue siendo su prioridad, pero prepararán un borrador sobre la integración económica regional para la cumbre de presidentes del APEC, que tendrá lugar en Sidney a inicios de septiembre.
«Acordamos que es el momento correcto para estudiar la posibilidad de un FTAAP, incluidas sus implicaciones», dijeron. «Existe un margen para una actividad más intensa en la agenda del APEC en apoyo de la integración económica regional».
La ronda de Doha sigue estancada porque los países ricos y pobres no han logrado un acuerdo sobre los porcentajes de reducción de los subsidios agrícolas otorgados a campesinos en Estados Unidos y la Unión Europea, ni sobre los niveles de rebaja de las tarifas industriales de los países en desarrollo.
Una reunión del G4, integrado por los cuatro actores clave de la OMC -Brasil e India de un lado, Estados Unidos y la UE por otro- buscó infructuosamente destrabar las negociaciones el mes pasado en Potsdam, Alemania.
El ministro de Comercio de Nueva Zelanda, Phil Goff, dijo que el colapso de las negociaciones fue «un retroceso real» pero dio la bienvenida al hecho de que los jefes de los grupos negociadores de la OMC estén preparando nuevos textos que serán la base para resucitar la ronda de Doha.
«Una cosa es segura: todos encontraremos en esos textos lo que no nos gusta, pero tenemos que apoyar a los jefes de los grupos negociadores», indicó.
«Si los miembros (de la OMC) socavan a los jefes de los grupos negociadores y a su proceso pasarán años antes de que tengamos otra oportunidad para concluir un acuerdo. Lo que está en juego es demasiado como para dejar que eso suceda», estimó.
«Todos entendemos que si no alcanzamos progresos claves esta vez, la ronda entrará en hibernación durante algunos años», afirmó Goff.
El ministro de Comercio australiano, Warren Truss, dijo que esperaba que la declaración del APEC otorgue un renovado ímpetu a las negociaciones de la OMC.
«Esta reunión deja claro que aún existe determinación para ser exitosos y voluntad de hacer esfuerzos para llegar a un buen resultado», dijo.
El APEC agrupa a Australia, Brunei, Canadá, Chile, China, Estados Unidos, Hong Kong, Indonesia, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Papuasia-Nueva Guinea, Perú, Filipinas, Rusia, Singapur, Corea del Sur, Taiwán, Tailandia y Vietnam. Panamá y Costa Rica también aspiran a entrar al bloque.