El lenguaje del poder es grosero, crudo y arrabalero. Ese lenguaje no lo hablamos los líderes comunitarios cuyos deseos de servir son siempre alimentados en nuestro corazón y mente por la necesidad, ya sea del que no tiene representación, del que como siempre es usado por los habilidosos y deshonestos politiqueros disfrazados de líderes dizque comunitarios pero que nunca se les ve en eventos sociales o trabajando para la comunidad en Guatemala, como las reglas de Conamigua lo requieren.
Byron Quezada
Señor Julio Villaseñor, Hugo Mérida, Osvelí Orozco, los más seríamos miembros de la comunidad en esa ruta con ese lenguaje grosero, crudo y arrabalero; a ustedes no se les está negando el derecho de ejercer su manera natural de ser, de ganarse la vida, de navegar por esas rutas que han navegado a través del tiempo, rutas que nosotros nos negamos a caminar, porque conocemos los resultados nefastos de la política en su forma actual en Guatemala. No, señores, ustedes son libres de hacer lo que deseen con sus vidas, NOSOTROS A LO ÚNICO QUE NOS NEGAMOS, ES QUE USTEDES SE PAREN EN NUESTRAS ESPALDAS DE MIGRANTES SIN REPRESENTACIÓN, PARA ALCANZAR ESAS METAS QUE PARA USTEDES SON GRATIFICANTES –PARA NOSOTROS NO-.
El grupo de G8 LA, que dice estar inscrito en el consulado de Los Ángeles, pero no pertenece a la Mesa Comunitaria de Los Ángeles, por supuesto que es válido, no así decente, pero válido, porque si están inscritos en el consulado les da derecho a votar por sus candidatos, mas nunca a luchar por la comunidad. En la Mesa Comunitaria nacen las ideas de cambio y progreso, donde los verdaderos líderes invierten su tiempo y sus propios fondos para poder tener voz y derecho a votar, ustedes no necesitan hacer esos sacrificios, porque solo necesitan tener al consejero titular, para manipular a su antojo los resultados como lo han hecho en la mayor parte de Los Estados Unidos, usurpando la representación de la comunidad migrante.
Señores y señoras, les suplico encarecidamente me disculpen, no debería de responder porque sé que dentro de nuestros grupos hay quienes desean que se les ignore, no obstante los ataques a mi persona y al coordinador y la secretaria, quienes se han dedicado al trabajo encomendado por nosotros los miembros de la MESA. Nada más.
En lo personal, quizás se me delegó para que presentara la moción de remoción de Julio Villaseñor como nuestro representante, porque como coordinador de la Mesa fui el primero en observar la deslealtad de nuestro representante titular en la reunión de Migrantes propiciado por la Cancillería en la ciudad de Guatemala el día 3 de marzo de 2012, donde Julio Villaseñor presentó un mensaje nacido en la organización Conguate que exigía la remoción por el ministro de la secretaria Gordillo, lo cual se dio, no obstante el Congreso rectificó indicando que no era jurisdicción del ministerio esa acción, ese mensaje no era el que nosotros deseábamos presentar, ya que habíamos decidido que la Mesa permaneciera neutral en el conflicto entre Conguate y la Secretaria Ejecutiva de Conamigua.
Todo después de escuchar que las razones del pleito eran el intento de la secretaria de atacar la corrupción y los intereses creados y personales de algunos asesores, entre los que estaba el nombre de nuestro representante titular Julio Villaseñor que incluían favores personales pedidos a la secretaria que favorecían a su negocio, eso de acuerdo a lo aclarado por Alejandra Gordillo en sesión realizada en nuestra sede donde Villaseñor estaba presente, confirmando lo dicho por la licenciada Gordillo, donde decidimos mantenernos al margen del conflictos entre Conguate y la Secretaria Ejecutiva de Conamigua.
En lo personal, soy solo la persona delegada por las organizaciones que después de tres años y medio reaccionamos, no en contra de Julio Villaseñor, sino de sus acciones deshonestas, su traición a la confianza depositada en él, de su agresividad y alevosa falta de respeto a los miembros de la comunidad que tomamos nuestro tiempo para unirnos como Mesa Comunitaria, con la esperanza de ayudar a los nuestros tanto aquí en el extranjero como en Guatemala, donde existe evidencia de nuestra existencia como organizaciones no lucrativas, contrario a algunas que están registradas en el consulado y que votan, pero son organizaciones fantasmas o negocios de migración o la Cámara de Comercio con dos o tres organizaciones inscritas en el consulado pero que solo se asoman el día de votación para asesores.
Como es sabido por todos, nosotros no podemos argumentar que representamos a los migrantes guatemaltecos como lo hace la organización compuesta por treinta y algo negocios que componen el Conguate de nuestros días, a la cual Julio ha servido desde que consiguió nuestro voto.
Señor ministro de Relaciones Exteriores, licenciado Fernando Carrera, en su calidad de Presidente de Conamigua, le informamos que a su debido tiempo, estaremos enviando una copia de la evidencia que nos obliga como gente decente a actuar en el desconocimiento de Julio Villaseñor como nuestro representante.
Por supuesto que sabemos que hay otras organizaciones de dudosa procedencia, que lo apoyan, están en el mismo negocio político, al cual no nos rehusamos a participar, si se hace bajo el margen legal, honesto y de respeto.
Nosotros como los primeros peregrinos en estas tierras, que corrían de la persecución religiosa y política de sus pueblos, deseamos integrarnos a la lucha por el voto en el extranjero, MAS NO CONCORDAMOS que las campañas políticas sean pagadas por nuestros gobiernos con fondos del pueblo, si en Guatemala no se hace.
Pensamos que el voto, lo cual es un derecho que no se puede o debe perder al solo cruzar una o dos fronteras sea respetado, MAS NOS OPONEMOS ROTUNDAMENTE que se críen dos escaños más en nuestro Congreso para dos representantes de los migrantes, en Los Estados Unidos, primero porque es discriminante para los guatemaltecos en otros países que se quedaran sin representación, segundo porque es irrealizable y tercero porque es irresponsable y corrupto que se desee pagar el costo total con el dinero que han pedido para el presupuesto de Conamigua, mientras hay desnutrición, la falta de medicinas en nuestros hospitales y libros de textos en nuestras escuelas.
Señor, las necesidades de los migrantes no cuestan 100 millones de quetzales, como lo han solicitado estos deshonestos como presupuesto para CONAMIGUA, que se gastarán en viajes, hoteles y alimentación, el dinero que el Congreso ha presupuestado para la repatriación de cadáveres, porque chantajean a quien se deje para lograr sus innecesarias reuniones en Guatemala y las diferentes ciudades de los Estados Unidos, argumentado la Reforma Migratoria, mientras esta solo necesitará del trabajo voluntario nuestro para guiar y ayudar a nuestros connacionales cuando el día llegue, le aseguro, los politiqueros brillarán por su ausencia como siempre, que se asoman solo a votar.
Los diez mil dólares que el MRE está enviando a los consulados para ser gastados por las mesas comunitarias, fue un chantaje de los mismos al Ministerio de Relaciones Exteriores, los migrantes no necesitamos de fondos para hacer el trabajo voluntario que por años hemos hecho. Ya no envíe más, en Guatemala y los repatriados necesitan esos fondos.
Atentamente.
Byron Quezada.
Presidente de Fraternidad Shecana Los Ángeles, California, excoordinador de la Mesa Comunitaria de trabajo en el consulado de Los Ángeles.