Con el apoyo de distintas agencias del Sistema de Naciones Unidas en Guatemala, organizaciones de San Marcos y de Quetzaltenango lograron redactar una propuesta de política nacional sobre agua y saneamiento y otras herramientas que permitirán la protección de las fuentes hídricas.
SAN MARCOS / Agencia CERGUA
De acuerdo con información de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en el marco de la iniciativa “Fortaleciendo las capacidades del pueblo Mam para la gobernabilidad del agua”, muchos pobladores, pobladoras, funcionarios de gobierno y municipales, fueron formados en temáticas relacionadas con el adecuado manejo del recurso hídrico.
El boletín de la OPS señala que la falta de acceso a una fuente digna de saneamiento afecta principalmente a las poblaciones pobres, así como a las mujeres y a la juventud; las zonas rurales cada vez se hacen más vulnerables debido a esa situación.
La información destaca que el crecimiento poblacional genera una gran presión en los recursos naturales, particularmente en los cuerpos de agua y en los bosques, por lo que el programa alienta un diálogo nacional que permita concretar acuerdos que se traduzcan en políticas descentralizadas, con priorización de la participación ciudadana.
En el programa participa la OPS, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), así como las carteras de Salud y de Ambiente y comunidades de San Pedro Sacatepéquez, San Antonio Sacatepéquez, San Cristóbal Cucho y Esquipulas Palo Gordo, de San Marcos; y San Martín Sacatepéquez, San Juan Ostuncalco y Palestina de los Altos, de Quetzaltenango.
Entre los resultados más importantes se destaca la redacción de distintas propuestas: la política integral de los recursos hídricos en Guatemala, la política nacional de agua potable y saneamiento y el diseño de un sistema de información local de agua potable y uno de gestión municipal para generar tarifas sociales sostenibles, concluye la información de la OPS.
Según información del Estado de la Población Mundial 2010, del UNFPA, cinco de cada 100 mujeres en Guatemala, no tienen acceso a una fuente de agua y de saneamiento; otra cifra significativa debe caminar al menos dos horas para conseguir una cubeta de agua, ese trabajo se recarga en las niñas y las adolescentes.