El diputado Amílcar Pop realizó semanas atrás una fiscalización in situ de la situación en la Empresa Portuaria Quetzal (EPQ), en donde constató que existe una buena cantidad de maquinaria en desuso, malas condiciones de infraestructura y una cuestionable inversión de Q30 millones para un parqueo. A su criterio, estos factores fueron la excusa forzada para conceder un usufructo a una empresa de capital español.

A criterio del legislador, las autoridades dejaron en abandono los recursos de la institución para justificar posteriormente el usufructo de una parte de la Empresa a la firma Transportes de Contendores Quetzal (TCQ), subsidiaria de la española Transportes de Contenedores de Barcelona.  

Las anomalías que Pop señaló fueron denunciadas por el sindicato de trabajadores de la EPQ; los trabajadores criticaron el desuso de la maquinaria que se utiliza para mover cargas dentro de la portuaria, así como la baja calidad de resultados de las empresas subcontratadas para extraer los contenedores de los barcos y trasladarlos a instalaciones de la Empresa Portuaria Quetzal.

Las irresponsabilidades señaladas son calificadas “dolosas y de mala fe” por el congresista, ya que también es responsabilidad de los administradores exigirles calidad a las empresas que laboran para la portuaria.

Pop dijo que lo que ocasiona el poco uso de maquinarias y la falta de calidad  de las empresas es baja eficiencia en los servicios y operaciones que realiza la EPQ, lo cual pudo haberse utilizado como argumento para dar en usufructo la portuaria.

El parlamentario también señaló anomalías y sobrevaloración de pago por elaboración del edificio de la EPQ, que tuvo un costo de Q30 millones y que actualmente se encuentra en total abandono. Otro es el pago por la misma cantidad para hacer un parqueo, en el cual se estacionan vehículos que sólo circulan dentro de los terrenos de la portuaria.

Pop añade que ya ha pedido un informe a la Contraloría General de Cuentas de la Nación, para que verifiquen si la obra y el monto pagado por el parqueo es lo adecuado, concluye.

De acuerdo a esto, el interventor de la EPQ, Allan Marroquín, indicó que los señalamientos de Pop y de los sindicalistas son contradictorios, ya que en el último año la portuaria aumentó el 12 por ciento de sus utilidades, o sea que de Q90 millones del 2011, aumentaron a Q102 millones en ganancias en el 2012.  

“Mi respuesta al diputado, es que su señalamiento es “absurdo” porque la administración está subiendo las utilidades de la EPQ y agregó que el argumento para dar el usufructo a la portuaria fue porque el muelle necesita crecer para que los barcos de tercera y cuarta generación puedan desembarcar en la EPQ,  dijo Marroquín.

Además indicó que efectivamente hay maquinaria “tirada”, porque no le dan buen mantenimiento. “Le hago un señalamiento directo (al sindicato), porque cada vez que una máquina entra por una batería le roban el alternador y por eso tiene que estar presentando denuncias ante el Ministerio Público”, dijo el interventor. 

Esto debido a que “Lamentablemente en la EPQ los talleres son manejados por el sindicato, que es allí donde se hacen grandes desapariciones de equipo importante, prácticamente lo saquean”, declaró.