Posibles fallos del Tribunal Constitucional alemán


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El Tribunal Constitucional alemán analiza hoy y mañana un recurso contra el programa de compra de deuda pública lanzado por el Banco Central Europeo (BCE), herramienta crucial contra la crisis del euro. Los posibles fallos del tribunal… y sus riesgos:

Karlsruhe Agencia dpa

LOS DEMANDANTES TIENEN RAZÓN

Los jueces de la corte en Karlsruhe pueden dar la razón a los 37 mil ciudadanos que presentaron el amparo y dictaminar que el BCE se extralimita en sus funciones y viola la Constitución alemana con su programa de compra de deuda pública de países en crisis como España o Italia.

El dictamen no pondría fin al programa, porque el BCE no depende de la Justicia alemana. Sin embargo, enviaría una señal muy negativa a los mercados y dejaría en la encrucijada al banco central alemán (Bundesbank), obligado a cumplir al mismo tiempo las recomendaciones del BCE y la Constitución alemana.

OTRO «SÍ, PERO…»

El Constitucional puede repetir la postura que mantuvo en casi todos los anteriores dictámenes sobre Europa y los paquetes de rescate al euro: una aprobación sujeta a condiciones que protejan al contribuyente alemán.

El peligro de esta vía recaería sobre el propio tribunal, cuya credibilidad comenzaría a verse en entredicho al repetir juicios poco concluyentes y sin verdadero efecto.

RECHAZO DE LA DEMANDA

Karlsruhe puede rechazar el recurso de inconstitucionalidad argumentando que es prematura porque, a fin de cuentas, el programa del BCE para comprar deuda no es vinculante y el banco ni siquiera tuvo que ponerlo aún en marcha. La decisión, sin embargo, no haría más que posponer la resolución definitiva del caso y dejaría abiertas las cuestiones legales de fondo.

APELACIÓN A LA JUSTICIA EUROPEA

Pocos lo consideran posible, pero en su versión más dura el Constitucional puede apelar al Tribunal de Justicia Europeo en Luxemburgo para denunciar que, desde su punto de vista, el BCE se extralimitó en sus funciones. También aquí el riesgo sería considerable para los propios jueces alemanes, que quedarían cuestionados si la Justicia europea responde avalando la actuación del banco.