Los cancilleres de la Unión Europea iniciaron hoy una reunión para estudiar maneras de poner fin a la violencia en Siria, nación inmersa en una guerra civil en la que han perdido la vida alrededor de 70 mil personas a la fecha.
Entre los posibles temas figura un ajuste al embargo general de armas que pesa sobre el país a fin de que se permita el envío de municiones a los rebeldes que intentan derrocar al régimen de Bashar Assad.
Sin embargo, los diplomáticos de algunos países de la Unión Europea han manifestado que un aumento en el suministro de armas es lo último que requiere Siria.
El general Salim Idris, jefe del Ejército rebelde, viajó la semana pasada a Bruselas para solicitar armas a la comunidad internacional.
En febrero, Gran Bretaña impulsó con eficacia una modificación al embargo a fin de que los países de la UE puedan enviar asistencia no letal a los rebeldes.
Mientras viajaba a la reunión, el ministro británico del Exterior, William Hague, dijo que su país aprovechó las modificaciones y dispuso el envío de materiales como vehículos blindados de cuatro ruedas, blindaje corporal y demás equipo de protección.
Dijo que Francia, Alemania e Italia consideraban proceder de igual manera.
«Hay una catástrofe humanitaria en Siria», expresó Hague. «Más de un millón de refugiados en los países vecinos, además millones de personas desplazadas, decenas de miles muertas», agregó.
Los cancilleres se reunirán en las próximas horas con Lakhdar Brahimi, representante especial de las Naciones Unidas y la Liga Árabe para Siria, quien intenta conseguir una solución política al conflicto en ese país.
Hague afirmó que el Reino Unido apoya el trabajo de Brahimi, aunque dijo que podría requerirse un aumento de la asistencia a los rebeldes para mostrar al régimen de Assad lo que puede suceder de no arribarse a una solución diplomática.
La titular de política exterior de la Unión Europea, Catherine Ashton, también expresó respaldo a una solución política.
«Necesitamos parar la matanza», dijo hoy Ashton, quien calificó de «devastadora» la situación en Siria.