Surge video de cascos azules capturados en Siria


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Varios soldados de las fuerzas de paz de la ONU capturados por los insurgentes sirios dijeron en un video ayer que se encuentran bien, incluso a pesar que activistas reportaron combates en la zona en que fueron apresados.

Por BARBARA SURK y BASSEM MROUE
BEIRUT Agencia AP

Los insurgentes detuvieron el miércoles a 21 cascos azules filipinos cerca de la aldea de Jamlah, en los Altos del Golán. El secuestro representa la primera ocasión desde que las tropas de las Naciones Unidas comenzaron a patrullar una zona tras un armisticio israelí-sirio en el Golán hace casi 40 años que las fuerzas de la ONU encuentran problemas durante su misión, dijo Timor Goksel, un ex funcionario del organismo mundial en la región, quien vive en Beirut.

Uno de los videos difundidos en internet muestra a tres hombres con uniforme camuflado y chalecos azules a prueba de balas con las siglas de la ONU y Filipinas.

«Nosotros, el personal de la ONU acá, estamos bien y el Ejército Sirio Libre nos trata bien», dijo uno de ellos en inglés. «No podemos regresar porque el gobierno (del presidente Bashar) Assad no cesa el bombardeo. A nuestras familias, esperamos verles pronto y estamos bien aquí».

El segundo video muestra a seis cascos azules en una habitación. Uno de los hombres, que dice ser un capitán, indica que mientras su convoy era atacado el miércoles, «nos detuvimos y varios civiles nos ayudaron a ponernos a salvo y nos distribuyeron en diferentes lugares para mantenernos seguros».

Un vocero de las Brigadas Mártires de Yarmouk, que retiene a los soldados de las fuerzas de paz, dijo a The Associated Press vía Skype que los 21 soldados «se encuentran bien y gozan de buena salud».

«Los consideramos como huéspedes», agregó

La captura de los cascos azules probablemente aumentará los temores israelíes de que la guerra civil de Siria altere el delicado equilibrio en la frontera entre ambos países. Israel capturó los Altos del Golán en la guerra de los Seis Días de 1967. Posteriormente, una fuerza observadora de la ONU, llamada UNDOF, fue establecida un año después de la guerra de 1973 para vigilar la tregua entre las fuerzas israelíes y sirias y mantener el alto el fuego.

La captura ocurrió una semana después de que se anunciara que varios cascos azules habían desaparecido.

El vocero de los insurgentes, que se negó a dar su nombre por razones de seguridad, dijo que la labor de las fuerzas de paz era asegurar que no entraran en la zona armas pesadas, como tanques, especialmente cerca de la línea del armisticio sirio-israelí. Durante meses, el régimen ha llevado tanques a la zona para combatir a los insurgentes, agregó, e indicó que helicópteros artillados se sumaron a la lucha la semana pasada.

Al preguntársele si los insurgentes están dispuestos a entregar a los cascos azules a la organización internacional, indicó que «el mando tendrá que decidirlo» y resaltó que una vez que los soldados de la ONU abandonen el área, el régimen podría matar «hasta 1.000 personas».

Insistió que por lo menos 10 personas han sido muertas y decenas heridas en los ataques con cohetes a Jamlah y poblados aledaños.

El ejército sirio libraba combates el jueves con las fuerzas de la oposición cerca de los Altos del Golán en la provincia meridional de Daraa, dijo Rami Abdul-Rahman, director del Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Londres. Agregó que los combates están centrados en las afueras de Jamlah, a un kilómetro de la frontera israelí.

En un video, un hombre que dijo ser vocero de las Brigadas de los Mártires de Yarmouk aseguró que su grupo mantendrá secuestrados a los cascos azules hasta que las fuerzas de Assad se retiren de Jamlah.

En Manila, el gobierno dijo el jueves que hay negociaciones para lograr la liberación de las fuerzas de paz de la ONU.