Un automóvil cargado de explosivos sacudió hoy el centro de Damasco, al estallar cerca de la sede del gobernante Partido Árabe Socialista Baath (Renacimiento) y de la embajada rusa, dejando varios vehículos destruidos o en llamas en una avenida principal y al menos cuatro muertos en un parque cercano, según testigos y activistas de oposición.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una organización activista con sede en Gran Bretaña, aseguró que al menos 31 personas murieron en el ataque. Añadió que la mayoría de los muertos eran civiles, pero que también fallecieron miembros de los servicios de seguridad.
La televisión estatal siria también reportó el estallido en el céntrico barrio de Mazraa, calificándolo como «un ataque terrorista» contra una zona muy poblada, cerca de una mezquita, un hospital, una estación de autobuses y una escuela. Reportó que entre los heridos había cuatro niños.
La agencia estatal de noticias publicó fotos de dos cadáveres tendidos en la calle.
La televisora progubernamental al-Ikhbariya mostró imágenes de lo que parecían ser por lo menos cuatro cadáveres sobre el suelo y autos incendiados. Las imágenes mostraron bomberos intentando apagar los autos y cadáveres sobre el césped de un jardín público, algunos desmembrados.
Testigos en el lugar de los hechos dijeron que el coche bomba estalló en un retén entre la embajada de Rusia y las oficinas centrales del partido Baath, al que pertenece el presidente Bashar Assad.
«Fue enorme, todo en el negocio se desordenó», dijo un residente local, quien pidió no ser identificado por temor a represalias por hablar con la prensa extranjera.
Llegaron ambulancias rápidamente al lugar de la detonación, la cual rompió ventanas y envió al cielo una columna de humo visible desde gran parte de la ciudad, afirmaron testigos.
Un funcionario de la embajada rusa, citado por la agencia estatal de noticias rusa RIA Novosti, dijo que la sede diplomática resultó dañada en la explosión, pero que nadie resultó herido.
La explosión del jueves ocurrió luego de dos ataques con mortero en la capital en igual número de días. El miércoles, estallaron dos proyectiles de mortero cerca de un estadio de fútbol en Damasco, matando a un jugador. El día previo, otros dos proyectiles de mortero explotaron cerca de uno de los tres palacios de Assad en la ciudad, ocasionando sólo daños materiales.
No mucho después del primer estallido del jueves, un funcionario de seguridad reportó una segunda explosión en el barrio de Barzeh, en el noreste de la capital. El funcionario habló a condición de mantenerse en el anonimato debido a que no está autorizado para informar a la prensa.
El Observatorio aseguró que dos autos bomba estallaron cerca de centros de seguridad en Barzeh. No proporcionó más detalles.
Hasta ahora, Damasco ha evitado mayormente el nivel de violencia que ha destruido otras ciudades sirias, aunque ya ha habido ataques con carros bomba contra edificios del gobierno en la capital.
El conflicto en Siria inició en marzo de 2011 con manifestaciones políticas contra el gobierno y se convirtió en una guerra civil entre el régimen de Assad y cientos de grupos rebeldes que buscan derrocarlo. La Organización de las Naciones Unidas dice que han muerto aproximadamente 70 milpersonas en el conflicto hasta ahora.