El diario El País de España ha sido uno de los periódicos de mayor reputación en Europa. Su manual de estilo casi siempre fue una lectura obligatoria en las escuelas de periodismo, sobresaliendo sus principios de apego a la ética y a la verdad.
Sin embargo, ahora este periódico es protagonista de uno de los peores escándalos que pone en entredicho su credibilidad.
Resulta que en su edición del pasado 24 de enero, publicó como “exclusiva” en primera plana, una foto que supuestamente era del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, la cual mostraba un aspecto de su tratamiento en Cuba, en donde está recluido a raíz de una intervención quirúrgica para extirparle células cancerígenas.
La imagen era grotesca, pues el enfermo aparecía entubado dando la impresión que el gobernante sudamericano estaba en la fase final de su vida. Realmente la foto era falsa, pues correspondía a otro paciente con características físicas parecidas a las del presidente Chávez, la cual habría sido tomada en el año 2008.
Después de salir a circulación los miles de ejemplares del diario, los mismos fueron retirados repentinamente y substituidos más tarde con otra portada. La foto todavía permaneció por algún tiempo en la página web del diario.
Posteriormente, los editores del periódico presentaron disculpas a los lectores, tras descubrirse que la foto era una maniobra, pues no correspondía al Presidente de Venezuela. El periodista chileno Ernesto Carmona, opinó a través de la Agencia Argentina de Prensa, Argenpress, que “Con falsa foto de Chávez: El País se hunde en el lodazal de la mentira”.
El periódico publicó la foto en su portal web con la siguiente leyenda: “El País ofrece una imagen inédita y exclusiva, tomada hace unos días, que muestra un momento de su tratamiento médico en Cuba…”
Según Carmona, resulta increíble que periodistas profesionales participen en estos montajes, que pretenden engañar al público, para cometer un fraude que atenta contra los principios deontológicos más elementales de esa profesión.
Oportunamente, el Gobierno de Caracas advirtió sobre la guerra psicológica que el entramado mediático transnacional ha desatado alrededor de la salud del jefe de Estado, con el fin último de desestabilizar a la República Bolivariana de Venezuela, desconocer la voluntad popular expresada en las elecciones presidenciales del pasado 7 de octubre y acabar con la Revolución Bolivariana.
Sin duda, la foto falsa no fue un error, sino una sucia maniobra política. El Gobierno de Venezuela ha anunciado que promoverá todas las acciones legales que procedan, en contra del diario español que publica mentiras, y pone en mal predicado el ejercicio de la noble profesión del Periodismo.