Banco Santander anunció hoy la absorción de sus filiales españolas Banesto y Banif para fortalecer su posición en el país ibérico en pleno proceso de restructuración del sistema financiero.

La integración, que se completará en mayo, supondrá la desaparición de las marcas comerciales Banesto y Banif y el cierre de 700 sucursales de las 4.665 que suman las tres entidades en España, dijo el grupo en un comunicado. No se mencionaron posibles despidos.

Santander ya poseía el 90% del capital de Banesto. El banco fue adquirido en 1994, un año después de ser intervenido por el Banco de España, que destituyó a la anterior gerencia por un grave agujero económico de la entidad.

Por su parte, Banif es un negocio de banca privada, que ya era 100% del grupo.

Santander, el mayor banco por capitalización bursátil de los 17 países de la eurozona, enmarcó estas absorciones en la necesidad de reforzar su marca en plena restructuración del sistema bancario español y ante las exigentes necesidades de capital impuestas a las entidades.

La cotización del Santander en la Bolsa de Madrid fue suspendida durante al menos una hora antes de hacerse público el anuncio. Tras regresar al mercado, su valor caía un 1,20%, hasta los 5,82 euros (7,65 dólares) por acción.