Entre la Fábrica y la Deconstrucción Empresarial


Edgar-Balsells

El pasado domingo 4 de noviembre se publicó una entrevista en elPeriódico, efectuada a Ricardo de la Torre, actual ministro de Economía, por la conocida periodista Beatriz Colmenares, como parte de una serie de intercambios con los titulares de las carteras gubernamentales.

Edgar Balsells


La entrevista lleva el sugestivo título “Queremos que este país se convierta en la fábrica de Latinoamérica”, el cual es entresacado de las propias declaraciones del ministro de la Torre, quien también se refirió a importantes iniciativas de Ley,  vinculadas con la productividad del trabajo y la competitividad del país.

El Ministro comienza sus declaraciones resaltando la denominada “Agenda Nacional de Competitividad”, que según sus propias palabras: “está basada en una política de acción por resultados: es un manual práctico que incluye a cada Ministerio y Secretaría, no un estudio más para guardar en el anaquel”.

Se busca también institucionalizar el Pronacom y el programa Invest in Guatemala, que hoy por hoy viene recibiendo sendos financiamientos de distintas fuentes bilaterales y multilaterales, que le otorgan en estos momentos al Ministerio de Economía un papel de primer orden en materia de transformación económica, al punto que por tales razones el Ministro nos dice que “quiere hacer de Guatemala la fábrica de Latinoamérica”.

A propósito de lo que viene ocurriendo con las multinacionales otrora domiciliadas en Guatemala, hoy se observa con preocupación la cadena de deslocalización sistemática, seguida desde hace algún tiempo por: Colgate-Palmolive, Procter & Gamble, e incluso con los cuarteles regionales de Walmart.

Asistimos entonces a una era de la Deconstrucción de la Empresa, tal y como nos la describe el experto español de Salamanca Andrés Suárez: “la gran empresa industrial moderna, integrada horizontal y verticalmente y diversificada sectorial y geográficamente, pudo crecer y crecer merced a la existencia de un estilo de organización ad hoc, (…) siendo un estilo de organización descentralizada por objetivos”.

Es así como el doble proceso de expansión y desintegración empresarial, es fundamentalmente de una naturaleza deconstructiva. Este término inicialmente tipificado por el filósofo francés Jacques Derrida quien afirma que “a toda deconstrucción sigue una construcción que habrá de ser deconstruida”.

Es decir, la empresa se está haciendo y deshaciendo constantemente en el mercado. Detrás de todo proceso de construcción empresarial viene otro de deconstrucción para reconstruir el mercado, y así sucesivamente: resulta ser éste un juego dialéctico de naturaleza cíclica y acumulativa que se realimenta.

En términos de estructuras organizativas, las nuevas figuras se flexibilizan al máximo, buscando un ambiente de “fuerzas de tarea”, que se crea para temas del momento, aprovechando las ventajas del nuevo clima de flexibilidad laboral, que según nuestro protagonista ministerial analizado, es resaltado como parte de los nuevos cambios institucionales en aras de la productividad y la competitividad.

Estos nuevos modelos se potencian cuando el país accede a Tratados de Libre Comercio y en términos regionales la casa matriz decide por contar con un cuartel general administrativo que, por ejemplo, con el modelo Walmart, se localiza en San José Costa Rica, país éste que por su estabilidad política y cercanía con entes como el INCAE, está produciendo Managers, con mentalidad regional y estrecha comunicación con otras grandes oficinas normalmente localizadas en Miami, Atlanta o New York.

Como podemos concluir: tamaña tarea sería entonces “convertir a Guatemala en la Fábrica de Latinoamérica”!