La sola mención de su nombre, J.K. Rowling, mantuvo al público en vilo.
La autora de «Harry Potter» habló durante poco más de una hora ante un lleno total el martes por la noche en el Lincoln Center de Manhattan en su única presentación pública en Estados Unidos para promocionar su primera novela para adultos, «The Casual Vacancy».
Vestida con falda y suéter oscuros, Rowling conversó en el escenario con la escritora Ann Patchett, leyó breves extractos de su nuevo libro y respondió preguntas preseleccionadas de sus fans. Rowling habló ante unas 2.500 personas, mujeres en su mayoría, reunidas bajo el alto techo dorado del Auditorio David H. Koch.
Patchett, quien de por sí cuenta con un gran número de seguidores por novelas como «Bel Canto», advirtió al comienzo que ella misma no era «particularmente agradable». Rowling no tuvo qué temer. Como cualquier ávida admiradora de Potter, Patchett la elogió efusivamente por inspirar a incontables lectores y le dijo cuánto había disfrutado de «The Casual Vacancy», cuyas reseñas han sido mixtas.
Fue una conversación adulta y literaria que incluyó una breve digresión para discutir el reciente fenómeno «Cincuenta sombras de Gray», la novela erótica de EL James. Cuando Patchett criticó la escritura de James considerándola inferior, Rowling respondió: «Pero así es la pornografía».
Rowling dijo sentir una conexión especial con los adolescentes debido a su «vulnerabilidad» y a cómo llegan a comprender que existe «maldad en el mundo». Las historias, dijo, pueden ayudarlos a explorar sus sentimientos.
También discutió lo difícil que es estructurar un libro y lo mucho que se apega el autor a sus personajes. Defendió a las editoriales tradicionales y el apoyo editorial que éstas ofrecen al explicar las razones por las cuales no autopublicó «The Casual Vacancy».
No sólo cambió el contenido al escribir el libro; cambió el proceso. Rowling observó que con los libros de Potter no le permitió a nadie- ni si quiera a su esposo Neil Murray – ver el manuscrito antes de terminado. «Es como discutir una idea antes de que la haya escrito», dijo, es un modo de matarla. Pero Murray pudo leer por anticipado algunos pasajes de «The Casual Vacancy».
«Fue útil», dijo la escritora.
Rowling reafirmó que está trabajando en un nuevo libro para jóvenes. No hay planes para una nueva novela sobre Potter, pero el celebrado mundo imaginario sigue en la mente de su autora. Al hablar de los trabajos literarios en los que le gustaría vivir, mencionó «Orgullo y prejuicio» de Jane Austen pero de inmediato confesó que también sueña con un territorio más personal: la vieja escuela de Harry y sus amigos.
«Sigo entrando y saliendo de Hogwarts», dijo.