Recomiendan que EE. UU. eleve impuestos y baje gasto


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La mejor manera de reducir el déficit federal de Estados Unidos sería una combinación de aumentos a los impuestos y reducciones al gasto, según un grupo de economistas.

Por SCOTT MAYEROWITZ NUEVA YORK / Agencia AP

El país necesita más estímulos fiscales desde ahora hasta 2013, pero habría que disminuirlos en 2014, dijeron en una encuesta los 236 integrantes de la National Association for Business Economics (Asociación Nacional de Economía de Negocios, NABE por sus siglas en inglés). El motivo es la naturaleza lenta de la recuperación de la economía nacional.

La mayoría de los economistas apoya que la mayoría o todos los contribuyentes gocen de una vigencia ampliada de las reducciones fiscales a la nómina, las actuales tasas marginales del impuesto sobre la renta y las tasas que se pagan por dividendos y ganancias de capital, por lo menos hasta 2013.

Las notables reducciones impositivas dispuestas durante el gobierno del presidente George W. Bush expirarán a finales de diciembre, a menos de que el Congreso apruebe extenderlas más tiempo.

La polémica se centra en si las reducciones fiscales se dejarán a todos o sólo a las familias con ingresos menores de 250 mil dólares al año.

La división entre los consultados aumenta en cuanto a si esas reducciones impositivas deben hacerse permanentes. Casi tres cuartas partes de los miembros considera que la rebaja al impuesto de nómina no debería ser permanente. Casi la mitad del grupo apoya que sean permanentes las reducciones a los impuestos a la renta, a los dividendos y a las ganancias de capital.

La mayor preocupación del grupo sobre la economía no es cuánto incrementar los impuestos ni cómo recortar el presupuesto. El problema señalado es la indecisión: 87% de los economistas cree que la incertidumbre en torno al rumbo que adoptará Washington frena la recuperación de la economía.

La encuesta sobre políticas económicas difundida el lunes también prevé que las tasas de interés a corto plazo permanecerán al menos otro año en su nivel actual. Los resultados son congruentes con la encuesta semestral más reciente de la NABE difundida en marzo.

Un número mayor de consultados –59%– dijo que la actual política monetaria federal está «más o menos bien».

El porcentaje que respondió que la política monetaria era «demasiado estimulante» disminuyó ligeramente en comparación con el porcentaje que tenía el mismo punto de vista en marzo, mientras que aumentó la proporción de quienes respondieron que la política era «demasiado restrictiva».