En esta entrega se encuentra la segunda parte del análisis de los candidatos y aspirantes a la Presidencia que participan en la actual contienda electoral. A decir del director de la Liga de Higiene Mental, Marco Antonio Garavito, la mayoría de postulados comparten variables en el perfil personal y político, que van desde la promoción de su imagen como “caudillos†hasta el establecimiento de ideas y discursos alejados de su realidad.
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Entre algunas incoherencias y contradicciones es creíble, a decir de Garavito, que muchos de los candidatos guardan algunos rasgos de personalidad en común que los ha logrado llevar a la contienda electoral. Entre ellos se mencionan el ego y las ansias de poder que se traducen en riesgo para posibles dictaduras.
En esta segunda parte del análisis se presenta una vista al interior de las pretensiones de Sandra Torres, Manuel Baldizón, Harold Caballeros, Rigoberta Menchú y Mario Estrada, quienes aspiran a la Presidencia de la República.
En la interpretación del experto destacan las ansias por el poder a cualquier precio, el caudillismo, la falta de representatividad a lo interno del país y las candidaturas débiles y sin posibilidades.
En el análisis que realiza el experto acerca de Sandra Torres sobresale la ruptura con su hermana y su potencial minidictadura, mientras que de Manuel Baldizón y Mario Estrada resalta su autonombramiento como los “salvadores†que necesita Guatemala, y de Harold Caballeros y Rigoberta Menchú, refiere que uno tiene y la otra carece de potencial político, pero ninguno tendrá resultados favorables en los comicios.
Sandra Torres
Unidad Nacional de la Esperanza
Sin duda alguna, Sandra Torres ha trabajado mucho el tema propagandístico alrededor del derecho que tiene como ciudadana a participar en estas elecciones, a pesar de que su candidatura tendría una prohibición constitucional.
Esto se entiende en la actualidad, cuando su participación se encuentra en riesgo, debido a las complicaciones que encuentra para inscribirse como candidata.
Aunque es una persona agresiva, dice el consultado, Torres desea presentar una personalidad sobria y ecuánime. “Vemos que aparece de blanco con el tema de la pureza y transparencia, que es algo que usa mucho en su imagen electoralâ€.
A decir de Garavito, Sandra Torres como política puede ser una figura “candidatiable†pero en otro contexto, sin tanta polémica y de no ser porque lo intenta hacer en el marco de un ejercicio de poder de aprovechamiento.
“El poder ha sido una obsesión y ella lo ha manejado con mucha fuerza en este gobiernoâ€, lo cual ha sido demostrado a través de la imagen de su exesposo, el presidente ílvaro Colom, durante estos tres años y medio.
Un ejemplo de la obsesión de poder que menciona el experto, es el hecho que se aleje de su hermana. “Esto es algo que aún no tiene la trascendencia que debería; ahí lo que hubo fue un choque de manejo de poder terrible que llegó a que ella se retirara y lo que hay ahí es como la punta de un enorme icebergâ€, dice.
“Esto me plantea una inquietud en relación a que si ella fuera elegida, ¿cómo va a manejar todo ese tema de la concentración de poder cuando ya tenga un poder formal?â€, se pregunta Garavito, implicando que sería algo riesgoso por poder llegar a tener una minidictadura.
“Ha hecho de todo para ser candidata y puede ser capaz de todo cuando tenga en sus manos ese poder formal que tanto buscaâ€, agrega.
Manuel Baldizón
Libertad Democrática Renovada
Garavito explica que más allá de lo que parece ser Otto Pérez Molina en el Partido Patriota, Baldizón parece ser el ejemplo perfecto de un caudillo y el “salvador†que quiere llegar a la Presidencia para rescatar al país
De esa forma, el entrevistado indica que el presidenciable plantea la candidatura de su partido en una figura eminentemente personal, que destaca a todo momento en este proceso electoral.
“Tiene una personalidad absolutamente autocrática que está tratando de vender esa idea que en algunos sectores puede calarâ€, a esto, Garavito se refiere al discurso del líder en el que Baldizón se automenciona como en tercera persona.
“Y por eso se llama Líder (…) Baldizón tiene su atractivo electoral, pero es un riesgo que él pueda quedar, porque hay una figura tan unipersonal que en los cuestionamientos de quien lo financia dice que es su familiaâ€, explica.
Garavito menciona que todo gira alrededor del candidato y no hay estructura partidaria en LIDER, no hay colectivo. “Es Manuel Baldizón pero por lo demás aquí no existe un partido, no hay cuadros ni visión colectivaâ€.
Por lo que indica que si el país quiere seguir intentando en la construcción de una sociedad basada en el Estado y en la ley, Baldizón no es una buena opción.
“También tiene muchas contradicciones que son producto que no hay una ideología clara, sobre todo al decir él que es un humanista pero que está de acuerdo con la pena de muerteâ€, agrega.
La mirada hacia el cielo en las vallas publicitarias y anuncios es un reflejo más de su planteamiento personal. “Aunque diga que solo el pueblo salva al pueblo, en realidad lo que quisiera decir es que sólo Baldizón salva al pueblo y puede tener complicaciones muy seriasâ€, puntualiza.
Harold Caballeros
Visión con Valores – Encuentro por Guatemala
El abanderado de la coalición Visión con Valores y Encuentro por Guatemala, Harold Caballeros, solo externa un sobrio reflejo de su potencial político en la actual contienda electoral. “Me parece que es una gente sobria, inteligente y líder, pero está en una coyuntura y en una posición que no le da muchas opcionesâ€, dice Garavito.
El psicólogo dice que a Caballeros, quien renunció como pastor hace más de cinco años, le será muy difícil desvincularse por completo de su antigua profesión, a la que sigue ligada su esposa y el resto de su familia.
Por su complicada situación espiritual, Caballeros pecaría de no poder capitalizar el voto de la población evangélica.
“Tiene una personalidad luchadora, pero las opciones se le disminuyen al momento de hacer la alianza con Encuentro por Guatemalaâ€, agrega.
Para Garavito, Harold tiene el potencial para ser un buen candidato, sin embargo, todo depende en si se decide a tener una mayor tradición política. “Al momento él es parte de los políticos emergentes y bajo ese esquema no da muchas garantíasâ€.
“Si él quiere, puede apostar a una carrera política, ya que tiene la imagen, el perfil y la mesura del discurso para potencialmente irlo construyendoâ€, agrega.
Por lo que dependería de Caballeros, si sobrevive a estas elecciones, a dedicarse a crear cuadros para su partido y buscar nuevos líderes.
“Tiene la personalidad que puede atraer, pero para un electorado que debe ser construido y éste no es el momento (…) depende de él si refuerza su partido o por ansias de poder se decide en aliarse a un partido viejo y perder el posible liderazgoâ€.
“Si se mantiene fusilando la política y acrecentando su imagen y ego no va a lograr nadaâ€, dice el consultado.
Rigoberta Menchú
Frente Amplio de Izquierda
“Sin ninguna duda, su candidatura también representa una especie de ego para ella, sobre todo teniendo una gran presión sobre el título como Premio Nobel que portaâ€, dice Garavito.
Pero aún más allá de esa presión, Garavito menciona que a Menchú no se le reconoce su representatividad en el país y tampoco cuenta con el aval de los pueblos indígenas como una lideresa.
“Hay que verla como un mito, ya que por ser indígena no quiere decir que en las votaciones tendrá arrastre con todos los indígenas; eso ocurrió en las elecciones pasadasâ€, agrega el experto, en referencia a la candidatura de la Premio Nobel con Encuentro por Guatemala, hace cuatro años.
Por lo que, en todo caso, su esfuerzo va dirigido a mantener un poco con oxígeno “a eso que se llama la izquierdaâ€, asevera el psicólogo.
Con su postulación, lo que logra es que la izquierda aún no muera. “URNG ni ANN tienen oportunidad de representar a alguien y todo se hace con el afán de mantener un espacio de eso que se llama la izquierda, pero que estructuralmente no existeâ€.
Lo único que considera positivo Garavito es la participación como punto extra en el currículum vitae de la candidata, que tiene una amplia aceptación en el ámbito internacional.
“Ella no es una líderesa dentro del país, es una figura universal por ser Premio Nobel de la Paz y su relación de reconocimiento es más de afuera, aquí dentro todo es imagen, incluso no es tan aceptado por ciertos sectores†agrega.
A parecer del entrevistado, el peso que tenía Menchú por el hecho de haber ganado ese reconocimiento a nivel mundial, lo único que ha provocado es que Menchú se apague poco a poco, por lo que en lugar de fortalecer su trabajo como Premio Nobel, se ha ido desgastando en unas elecciones que de entrada las da por perdidas.
Mario Estrada
Unión del Cambio Nacional
“En el caso de Estrada ni siquiera lo analizaría ya que él cae en la lógica de quienes están jugando en la política sin ninguna opción de aportarle nada a la sociedad en sentido positivoâ€, dice pertinazmente Garavito.
A decir del director de la Liga de Higiene Mental, lo único que ha logrado hacer el candidato por la Unión del Cambio Nacional es construir una imagen de salvador y protector con aquellos que dice llamar sus amigos.
“í‰l ha querido construir, a nivel nacional, esa imagen que actualmente tiene en Jalapa; él es el protector de Jalapa y a nivel nacional quiere trasladar ese imaginarioâ€.
Algo que no le ha valido de mucho, “Mario Estrada y la UCN es parte de todas aquellas comparsas que se dan en el proceso electoral y que alrededor se arma un circo teatral para darle sentido al juego electoralâ€, refiere.
Con esto indica que Estrada apenas pasa como figura política y si ha logrado tener imagen a nivel nacional es en su mayoría por el papel de “amigo leal†que ha tenido con personalidades tales como el expresidente Alfonso Portillo y el exministro de Gobernación y alcalde de Villanueva, Salvador Gándara; ambos postulados por la UCN y ligados a procesos penales.
De lo contrario, refiere que “Mario Estrada es de esos inciertos de los que están por estar, porque tienen sus propios negocios y que no tienen ninguna opción por llegar ni a segunda vueltaâ€.
Sin embargo, su caudal electoral y la representación que alcanzaría en el distrito de Jalapa le asegurarían piezas clave en las negociaciones políticas con otros partidos y agrupaciones.
Se trata entonces, de una jugada de estrategia, que implica alianzas, acuerdos y negociaciones extrapartidarias.