EL REFERENDO GUATEMALA-BELICE, CUANTIOSA INVERSIÓN


260 MILLONES, refiere María Eugenia Villagrán presidenta del Tribunal Supremo Electoral se gastarían en la consulta popular programada para el 6 de octubre 2013. Dicha consulta sería ejecutada por el referendo para tratar en la Corte Internacional el conflicto de BELICE.

Jesús Alvizures A-1 606839


Se cree que dicha inversión es un riesgo que se quiere correr al llevar esto a la CORTE INTERNACIONAL DE JUSTICIA donde el fallo será inapelable y en vez de hacer esa inversión millonaria, se debería pensar en invertir en las urgentes necesidades que al pueblo aquejan y conformarnos con la pérdida de los derechos que se reclaman y se han empantanado durante tantos años, comenzando por la falta de rigor para el incumplimiento de los tratados consensados por los Gobiernos nefastos que dieron origen a esta pérdida territorial extensión Belice.
Este conflicto nunca se ha enfrentado con valentía, siempre hizo falta pantalones para la recuperación de los derechos que asistían a Guatemala, donde hubo incumplimiento de convenios entre los británicos y este país que se ha quedado mutilado y no hay vuelta de hoja, pues Belice proclamó su Independencia y no deseo en ningún momento pertenecer de vuelta a Guatemala.
Sería bueno que esta consulta fuera analizada por entendidos en la materia Constitucional para detectar los beneficios o los contras para la inversión de tanto dinero, que después tendrá que pagar el pueblo con la gestación de nuevos impuestos o el incremento de los que ya existen, este país en las últimas décadas se ha caracterizado por hablar solo de millones, unos que se invierten y otros que van para las cuentas bancarias de los CORRUPTOS.
En la actualidad, la soberanía que se reclama sobre la franja de territorio guatemalteco, Belice dice que le pertenece y a mi criterio esta reclamación no dará los frutos esperados pues son juego de malabarismo político, pues hay que recordar que Guatemala en 1,991 reconoció la Independencia de Belice, pero siempre sosteniendo una clara reclamación de lo que tarde ha querido sea devuelto al territorio. Es tiempo que se deje ya de soñar y aceptar lo que se generó por la ineptitud de los Gobiernos que soslayaron su recuperación, en un acto irresponsable que abarcó las fuerzas militares que son las garantes de la soberanía nacional, más como su Comandante General en esos tiempos agachó la cabeza, aquí estamos a través del tiempo en la plaza de los lamentos debatiendo lo que se pudo hacer y no se hizo.