El circuito alemán de Nürburgring, que acoge el Gran Premio de Alemania de Fórmula Uno, pondrá en marcha un procedimiento de insolvencia en medio de temores de que podría quedarse sin dinero en efectivo, mientras que la Comisión Europea considera ayuda gubernamental.

El gobierno estatal de Renania-Palatinado, que es el dueño del Nürburgring GmbH que atraviesa problemas financieros, se pronunció el miércoles sobre la medida, informó la agencia de noticias dapd.

El gobernador del estado, Kurt Beck, dijo que la razón era que no se esperaba que la comisión ejecutiva de la Unión Europea aprobara la ayuda gubernamental prevista de 13 millones de euros (16 millones de dólares) para finales de este mes.

Eso llevaría a una «alta probabilidad de insolvencia a finales del mes debido a la falta de liquidez», dijo Beck en la capital del estado, Mainz. Añadió que su gobierno decidió adelantarse al optar por poner en marcha «procedimientos de insolvencia ordenados».

El GP de Alemania se ha alternado en los últimos años entre Nürburgring y Hockenheim. La carrera de esta semana es en Hockenheim.

La empresa privada que organiza los eventos en el circuito, Nürburgring Automotive GmbH, dijo que no se veía directamente afectada por la insolvencia del propietario y continuará con sus operaciones.

La compañía dijo en un comunicado que estaba de acuerdo con el jefe de la Fórmula Uno, Bernie Ecclestone, quien manifestó la semana pasada «un concepto con el que la Fórmula Uno el próximo año sería viable». La compañía había pedido al gobierno del estado su aprobación, y expresó la esperanza de poder llegar a un acuerdo en breve. No dio detalles.