Ayer, a las instalaciones del Registro de Ciudadanos (RC), en el Tribunal Supremo Electoral, Sandra Torres, precandidata a la Presidencia por la alianza UNE-Gana, se apersonó para conocer el proceso de su inscripción. Tras esa visita, parecí­a que estaba todo aclarado. “La impresión que tengo es que no hay mala fe”, confió a su salida la exprimera dama.

Sin embargo, la percepción para hoy era muy diferente, ya que los representantes de la coalición de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y Gran Alianza Nacional (Gana), nuevamente se encontraban reunidos en el TSE, esta vez con el Jefe de Organizaciones Polí­ticas, Francisco Garcí­a Cuyún.

Jairo Flores, secretario general de la UNE, y Jaime Martí­nez Lohayza, su homólogo de la Gana, llegaron acompañados de César Fajardo y Orlando Blanco, ambos altos representantes de la UNE, para continuar presionando por la inscripción.

Según los dirigentes, el dictamen para continuar con la inscripción no habí­a sido remitido de Organizaciones Polí­ticas al RC. La tensión empezaba a crecer, y lo que apenas una noche anterior se consideraba como “procedimientos sin mala fe”, hoy se denunciaba que malintencionadamente se estaba atrasando.

Tras casi tres horas de reunión, en que se observaba a los representantes de la coalición salir para hablar por teléfono, se llegó a la conclusión de que un recurso estaba bloqueando el proceso de inscripción, y que por ello Organizaciones Polí­ticas aún no habí­a trasladado el expediente.

Coincidentemente, en la Plaza de la Constitución, Joviel Acevedo, lí­der de la Asamblea Nacional del Magisterio, se encontraba reunido con al menos 400 maestros, indicando que protestarí­an para presionar por la aprobación de los préstamos en el Congreso de la República.

Dennis Alonzo, ministro de Educación, expresó su extrañeza por la actitud de los maestros, ya que la cartera actualmente no tiene problemas con los fondos, por lo que no sabí­a por qué protestaban.

En ocasiones anteriores, el Magisterio anuncia con varios dí­as de anticipación sus movilizaciones, pero hoy se presentaron sin advertencia, por lo que habí­a temor que, en caso se pusiera más tensa la situación en el TSE, los maestros podrí­an encaminarse hacia la 6ª. avenida y 1ª. calle de la zona 1 para rememorar hechos ocurridos hace ocho años.

SE DESENTRAMPA

Mientras tanto, en el TSE, la tensa reunión continuaba. Al filo del mediodí­a, la situación aún no se aclaraba. Al buscar explicaciones sobre por qué la candidatura de Torres Casanova no avanzaba, se supuso que, quizá, un recurso estuviese entorpeciendo el proceso.

Se vinculó esta suposición a un recurso presentado ayer por abogado José Arévalo, en nombre del diputado Obdulio Oquelí­, que solicitó un amparo provisional contra el TSE en el Juzgado de Paz de turno. Sin embargo, al ser consultado el legislador, él constató que no habí­a interpuesto algún amparo para bloquear.

Al irse acabando los argumentos, y mientras las horas avanzaban, César Fajardo, fiscal de la UNE, indicó que el dictamen para que se procediera a la inscripción “ya habí­a sido resuelto pero que aún no habí­a sido remitido a la dirección del RC”.

Las acusaciones estaban subiendo de tono, y el mismo Fajardo indicó a los medios de comunicación que “dicho dictamen aún no se habí­a remitido al registro por ordenes superiores, lo cual crea ciertas suspicacias dentro del proceso que se está llevando a cabo”, indicó, contrastando al tono de las declaraciones que ayer dijera la ex Primera Dama.

Sin embargo, una hora después, la tensión iba bajando, hasta que los fiscales lograron presionar para que se diera el dictamen para la inscripción. Los representantes de la coalición esperaron a que se completaran los formalismos, y, acto seguido, acompañaron para el RC a que Miguel Solí­s, jefe de esta dependencia del TSE, recibiera el dictamen.

A partir de ahora, Solí­s tiene tres dí­as para resolver la inscripción de Torres Casanova.