Esperanza ante cambio climático


Clima. Dos hombres remueven placas de tierra en Irak, en una región afectada fuertemente por el cambio climático.

El mundo tiene los medios para hacer frente al calentamiento climático a un costo moderado usando las tecnologí­as actuales, a condición de que no se tarde mucho en iniciar la lucha, indicaron el viernes los especialistas mundiales del clima al término de su reunión en Bangkok.


«Si seguimos haciendo lo que ahora, tendremos serios problemas», advirtió Ogunlade Davidson, copresidente de uno de los grupos de trabajo del Grupo Intergubernamental de Expertos en Evolución del Clima (IPCC en inglés) al presentar la sí­ntesis de sus cinco dí­as de debates en la capital tailandesa.

En este sentido, los próximos 20 ó 30 años serán cruciales para disminuir el calentamiento del planeta, indicó el IPCC en su documento, que pretende ser un «resumen dirigido a quienes toman las decisiones».

La sí­ntesis –aprobada por los cerca de 400 delegados del IPCC– «identifica claramente medidas para luchar contra el cambio climático a un costo relativamente moderado», afirmó por su parte el presidente del Grupo, Rajendra Pachauri.

Según ese documento, las medidas para limitar el aumento de la temperatura planetaria en unos 2 grados centí­grados (en relación al perí­odo 1980-1999) se traducirí­an en una disminución del 0,12% de los í­ndices de crecimiento anual del Producto Interior Bruto (PIB) a partir de 2030.

Un arsenal de soluciones tecnológicas y de medidas de reglamentación permitirí­a luchar eficazmente contra el calentamiento climático.

Entre ellas, el IPCC destacó las energí­as renovables –eólica, solar y geotérmica–, además de la nuclear, desatando así­ una polémica entre sus propios delegados, pues algunos de ellos se oponen ferozmente a este último tipo de energí­a.

«Existe un importante potencial para reducir las emisiones en los próximos decenios», estimó por su parte Bert Metz, copresidente del grupo de trabajo III del IPCC, que es una instancia creada por la ONU.

Según Metz, «ese potencial es tal que permitirí­a compensar el crecimiento de las emisiones de gas con efecto invernadero con las tecnologí­as actuales».

El experto precisó que «todos los sectores podrí­an contribuir a la reducción de las emisiones (de gas)» con efecto invernadero (de los que el principal es el dióxido de carbono), considerados como responsables del calentamiento atmosférico.

«Todos los sectores podrí­an contribuir a reducir las emisiones de gas», agregó al subrayar «el sector de la construcción, que es el que ofrece el mayor potencial para acciones a bajo costo».

«Reducir la desforestación permitirí­a también aportar una importante contribución a la reducción de las emisiones» (de gas), agregó.

El tema del costo de la lucha contra el cambio climático dominó los cinco dí­as de debates del IPCC, en los que suscitó ciertas fricciones entre algunos de los paí­ses representados, incluida China, que se convertirá en el primer paí­s contaminador del planeta antes de 2012.

La sí­ntesis aprobada este viernes pone en evidencia «costes de reducción totalmente asequibles», declaró a la AFP Marc Gillet, jefe de la delegación francesa.

La sí­ntesis redactada en Bangkok también satisfizo a las organizaciones no gubernamentales que luchan por el medioambiente.

«Hay que ponerse a trabajar desde el lunes», señaló el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) en un comunicado.

Para el WWF, «el texto de la capital tailandesa muestra por primera vez que es posible luchar con ambición contra la contaminación del clima sin que ello cueste una fortuna».

La sí­ntesis del IPCC afirma que las emisiones de gas deberí­an alcanzar de aquí­ a 2015 un «tope» para, a continuación, disminuir, si se quiere mantener el alza del promedio de la temperatura mundial entre 2 y 4 grados centí­grados, en el mejor de los casos analizados.

Según un informe precedente del IPCC publicado en febrero en Parí­s, en el peor de los casos, el aumento de la temperatura podrí­a llegar a 6,4 grados centí­grados de aquí­ al año 2100, respecto al perí­odo 1980-1999.

Perspectiva

– De 1970 a 2004, las emisiones de gas con efecto invernadero, responsables del cambio climático, aumentaron 70%.

– Los esfuerzos para atenuar el calentamiento en los próximos 20 ó 30 años tendrán «un amplio impacto» sobre las posibilidades de lograr niveles más bajos de estabilización de las emisiones.

– Todos los sectores económicos tienen un potencial importante de reducción de emisiones de aquí­ a 2030. Ese potencial es suficiente para compensar el crecimiento global de emisiones o para reducir las emisiones por debajo de sus niveles actuales. En el sector de la construcción las emisiones podrí­an ser reducidas en 30% antes de 2020.

Alternativas

– En las condiciones actuales, las emisiones mundiales de gases con efecto invernadero seguirán aumentando.

– Estabilizar las concentraciones de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera a niveles situados entre 445 y 490 (partí­culas por millón) permitirí­a contener el alza media de la temperatura entre 2 y 4 grados centí­grados, respecto al perí­odo preindustrial.

– Las medidas para limitar el aumento de la temperatura planetaria en unos 2 grados centí­grados (en relación a 1980-1999) se traducirí­an en una disminución de 0,12% del í­ndice de crecimiento anual del producto interior bruto (PIB) a partir de 2030.

– Ese coste podrí­a ser compensado parcialmente por los beneficios producidos por la reducción de emisiones en los sectores de sanidad (mejora de la calidad del aire), seguridad del suministro energético y empleo.

Soluciones

– Disminuir las subvenciones a las energí­as fósiles (petróleo, gas o carbón) e imponer un impuesto sobre el carbón: más sube el precio del carbón, más los usuarios de energí­as fósiles tendrán interés en utilizar tecnologí­as más limpias y más rápida y mayor será la disminución de las emisiones de gases.

– Fomentar las energí­as renovable (eólica, solar, geotérmica y otras energí­as limpias) con ayudas de subvenciones o tarifas impuestas para hacerlas competitivas respecto a las energí­as fósiles.

– La energí­a nuclear forma parte de esas tecnologí­as que permiten reducir las emisiones de gases.

– El almacenamiento de CO2, una tecnologí­a aún experimental que consiste en capturar las emisiones de grandes instalaciones industriales y enterrarlas, podrí­a contribuir de forma importante a reducir las emisiones en un plazo de 20 años.

– Reducir la contaminación de los transportes: reforzar los lí­mites de las emisiones de CO2 para los vehí­culos, fomentar los transportes públicos y las formas de transporte no motorizado y aumentar los impuestos sobre la compra de vehí­culos y carburante.

– Sector de la construcción ecológico, con normas más severas y viviendas con sistemas de calefacción y climatización más limpios. Así­ se podrí­an evitar 30% de las emisiones de CO2 producidas por el sector antes de 2020.

– Reducir las emisiones de la industria con incentivos fiscales y certificados de emisión de CO2.

– Modificar las prácticas agrí­colas y reducir la desforestación.