El líder de la guerrilla Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), el subcomandante Marcos, encabezó ayer una protesta por las calles de Ciudad de México para recordar la represión policial registrada hace un año en el poblado de San Salvador Atenco (centro).
«Presos políticos libertad» y «Policías asesinos» eran algunas de las consignas que corearon más de mil personas que acompañaban a Marcos en la manifestación.
Tras recorrer la céntrica avenida Reforma de la Ciudad de México y llegar a la sede de la secretaría de Gobernación (Interior), los activistas reclamaron la liberación de los «26 presos políticos» por los hechos de Atenco.
Los días 3 y 4 de mayo de 2006 vecinos de Atenco y Texcoco, localidades del área metropolitana de la Ciudad de México, protagonizaron duros choques con miles de policías tras cortar una carretera para protestar por el desalojo de unos vendedores ambulantes.
Durante sendas cargas policiales, dos personas (una de ellas menor de edad) resultaron muertas por disparos de bala, algunos agentes fueron golpeados y retenidos durante horas, más de un centenar de manifestantes fueron arrestados y apaleados, y varias mujeres denunciaron abusos sexuales y violaciones por parte de los policías durante su traslado a prisión.
El miércoles, Amnistía Internacional denunció que siguen impunes las violaciones de los derechos humanos cometidas por los agentes.