A diferencia de Norcorea, pocos critican a India por lanzamiento


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El exitoso ensayo de un poderoso y nuevo misil de India, que podría llevar un arma nuclear hasta Pekín o Shanghái apenas causó reacciones internacionales, ni siquiera en China, un hecho que contrasta con las condenas que recibió Corea del Norte en todo el mundo por un lanzamiento fallido.

Por RAVI NESSMAN NUEVA DELHI / Agencia AP

Las respuestas tan diferentes muestran que el mundo acepta cada vez más a India como una potencia nuclear estable y responsable, mientras ve a Norcorea como una amenaza potencial.

«Lo que importa no es la lanza, sino quien la porta», dijo Rahul Bedi, analista de defensa en India. «Corea del Norte es una nación condenada. Es un país paria. Es bien conocido su historial de violaciones a los acuerdos nucleares. En este sentido, India ha surgido como un país responsable».

La muda respuesta a la prueba del jueves pone en relieve qué tan lejos ha ido India al ganar la aceptación de su programa nuclear. Después de que el gobierno indio probó su primera bomba nuclear en 1974, Estados Unidos lo sancionó unos 25 años.

Pero la década pasada, Washington retiró las sanciones y eventualmente ratificó en 2008 un importante acuerdo que permitió el intercambio civil nuclear y aceptaba en la práctica a India como un país con esa capacidad tecnológica.

India se congratuló por el lanzamiento del misil Agni-V como un paso importante hacia sus aspiraciones de ser una potencia regional y mundial.

«La nación hoy está en alto», dijo el ministro de Defensa A.K. Antony, citado por el diario Press Trust of India.

El misil, con un alcance de 5 mil kilómetros (3 mil 100 millas), todavía requiere una serie de pruebas y debe superar otros obstáculos burocráticos antes de poder ingresar a los arsenales indios en unos pocos años.

Las diferencias entre ambos lanzamientos estaban claras antes de realizarse.

Corea del Norte insistió en que el lanzamiento del cohete el próximo domingo era parte de su programa civil espacial para poner en órbita un satélite de observación. Estados Unidos y otros países lo consideraron una excusa para prepararse con miras a contar con un misil de largo alcance equipado con una ojiva nuclear. El lanzamiento fracasó cuando el cohete se partió en dos poco después de despegar.

En cambio, India fue clara desde el principio al decir que probaría un misil nuclear capaz de alcanzar una ciudad importante en China.