Ricos pagarían por salud gratuita


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El gobierno conservador español sugirió hoy que podría impulsar una reforma para que las personas de mayores ingresos paguen por los servicios de sanidad, que son universales y gratuitos en el país ibérico.

Por JORGE SAINZ MADRID / Agencia AP

El ministro de Economía, Luis de Guindos, dijo que es importante buscar fórmulas para equilibrar el gasto sanitario, en un nuevo mensaje de austeridad con el objetivo reducir el déficit y cumplir los compromisos adquiridos con la Unión Europea.

«Tenemos que abrir un debate entre la administración central y las comunidades autónomas y pensar, por ejemplo, si tenemos que proveer los servicios sanitarios gratuitos a quien gane más de 100.000 euros (131 mil dólares)» al año, dijo De Guindos a la radioemisora Cadena Ser.

En ese sentido, De Guindos aseguró que un sistema general de copago sanitario, como el de otros países, no sería una «panacea» para los problemas financieros de España.

Poco después, el portavoz del gobernante Partido Popular, Carlos Floriano, aseguró que la De Guindos hablaba a título personal y que la apuesta de los populares es mantener la gratuidad de la sanidad.

Aunque no se dieron detalles, el gobierno dijo que aprobará medidas en los próximos días con las que esperar ahorrar 10 mil millones de euros (13 mil 100 millones de dólares) en dinero destinado habitualmente a educación y sanidad, dos de los servicios públicos menos afectados hasta el momento por las políticas de austeridad.

El ajuste se realizará buscando una «mayor racionalización, eliminación de duplicidades y eficiencia en la gestión de los grandes servicios públicos», según informó la presidencia del gobierno en un comunicado de prensa.

Además, se avanzó que el gobierno realizará algunas privatizaciones y la venta de las entidades financieras con participación mayoritaria del sector público.

El anuncio llegó después de unos días de gran tensión en los mercados, que volvieron a castigar a España y sembraron dudas sobre su solvencia.

La rendimiento de la deuda española a 10 años -el termómetro que suele medir la confianza de los inversores en la solvencia de un país- escalaba el lunes al 5,74% y la prima de riesgo con respecto al bono de referencia alemán se mantenía por encima de los 400 puntos básicos, algo que no ocurría desde noviembre.

Aunque no existe una regla general, una prima de riesgo superior a los 400 puntos y un interés de los bonos a largo plazo en el entorno del 7% marcan una línea roja, que puede conllevar la necesidad de un rescate financiero.

España se comprometió con Bruselas a rebajar su déficit público del 8,5% al 5,3% del PIB en 2012. Para ello, anunció recortes por valor de 35 mil750 millones de dólares, combinados con subidas de impuestos y una polémica amnistía fiscal para repatriar dinero negro no declarado.

La política de recortes ha topado con un desempleo de casi el 23% lejos de tocar techo y la previsión de una vuelta a la recesión y una contracción económica del 1,7% del PIB para este año, según las estimaciones del gobierno.