El problema no es Arjona, es el “bullying”, las violaciones y asesinatos de niños, niñas, hombres y mujeres, la pobreza extrema, y otros más


GLADYS_MONTERROSO

“Jesús pensó ‘me haré invisible para que todos mis hermanos dejen de estar hablando tanto de mí y se tiendan la mano” Ricardo Arjona

Gladys Monterroso
licgla@yahoo.es


Me cansa y asombra que con el pretexto de crear polémica, varios comunicadores se han rasgado las vestiduras durante una semana completa sobre el hecho que Ricardo Arjona haya realizado un video publicitario, promocionando una bebida carbonatada, bajo el contexto de las bellezas más que reconocidas de nuestro país, cuando un niño muere a causa que  dos compañeros adolescentes le penetraron una manguera de compresión en el ano, y le destruyeron los intestinos, quedando todo impune; naturalmente, me pregunto ¿Cuál es el problema del país? Y la respuesta contundente, es que muchos escriben por escribir, sin entrar a fondo sobre los problemas reales sobre los que hay que pedir a gritos soluciones, no solamente del gobierno, sino de la ciudadanía en general, observo en ciertos articulistas una falta total de conciencia para utilizar el espacio de una columna de opinión, en lo personal, las letras de muchas canciones de Arjona relatan una penosa parte de la realidad nacional, y son más que una simple trova, son denuncias, más que melodías baratas, pero ese no es problema, como diría su  canción, el problema es que asuntos de mayor importancia que golpean y enlutan a cientos de hogares guatemaltecos no son abordados con la seriedad y objetividad por los mismos de siempre, que son un grupúsculo, cuyo único objetivo pareciera ser destruir a quien se les ocurra, mientras despotricaban contra Arjona, el niño cruelmente atacado por sus compañeros en Huehuetenango muere el sábado, sin que nadie de estos defensores de la dignidad digan esta boca es mía, una niña se suicida víctima del bullying, y ayer lunes denuncian que en el Liceo Guatemala existe el mal fruto de padres, maestros y directores irresponsables que destruyen valiosas vidas, por no desafiar los problemas de frente, pero no es solamente este plantel en el que existe esta grave enfermedad psicológica, es en la mayoría (si no todos) los establecimientos del país, incluyendo los de más “prestigio” lo cual no se hace público por diversas circunstancias, pero son más los casos de los que se saben, y esperaríamos. En el mismo contexto de violencia, sumamos a los niños y niñas violadas, casi diariamente, cuyos casos quedan en familia, y se suscitan en cualquier familia, no solamente la clase mal llamada baja, en las “buenas familias” también se da, pero todo queda escondido detrás de cuatro paredes, por la “reputación”. La extrema pobreza en que vive diariamente Juan y María Pueblo, quienes se enfrentan a la extorsión de pandilleros, el temor a la muerte, la falta de empleo, y la pobreza que atacó a un 53.51% del total de la población durante 2011, según datos estadísticos del Instituto Nacional de Estadística (INE), ¿Sabe usted lo que significa ser pobre? Según el DRAE, es “Necesitado, que no tiene lo necesario para vivir.” Hasta agosto de 2011 se había contabilizado una población de 13 millones 824 mil 463, por lo que 7 millones 397 mil 470 personas, viven con menos del total de la canasta básica, ¿Y cómo sobreviven? Con tortillas, chile, café y frijoles.

Aunado a lo anterior, Guatemala ocupa un deshonroso lugar en relación a la desnutrición infantil, que en palabras más objetivas son viles asesinatos de menores, a quienes se les veda el derecho a la vida, eliminándolos, de la forma más execrable posible, de hambre, según Unicef la niñez guatemalteca cuenta con un 49% de desnutrición crónica, lo que es lo mismo la mitad de nuestros niños están condenados a una vida (Si consiguen sobrevivir, que no es vivir, porque a esta situación no se le puede llamar vida, es un insulto) en condiciones infrahumanas, ya que no conseguirán jamás tener condiciones físicas e intelectuales que les permitan una vida digna.

En Guatemala se reportaron según elPeriódico del 7 de febrero de este año,  y de acuerdo a estadísticas del Inacif 524 cadáveres con señales de violencia, solamente en enero, un promedio, diario de 17 muertes ¿A quién le preocupa este fenómeno, si no le toca a un ser querido,  a un amigo, o un personaje de la élite guatemalteca? A NADIE.

Observando objetivamente la dramática situación del país, a mí, y a miles de guatemaltecos que rechingados nos importa si Arjona graba un video para la Pepsi, mostrando las bellezas naturales de Guatemala, por Dios, es un insulto para la inteligencia, que le demos más importancia a semejante situación si nuestros males de fondo son otros, mismos, que es nuestra más que incansable obligación denunciar, y por los que debemos luchar, cada quien desde su trinchera, por un cambio, el problema no es nuestra identidad porque nunca la hemos tenido, ya que los mayas se extinguieron antes que vinieran los españoles,  y no somos más que el producto de la fusión de culturas, ¿Qué defendemos, si ni siquiera somos capaces de tener una identidad propia? Seguramente quienes han utilizado un valioso espacio para ocuparse de Arjona se toman un café en Starbrucks, y no en Café León, porque no se atreven a ir a la zona 1, pero ¿De qué hablamos? Incongruencia es la respuesta, falta de visión de la realidad del país en que vivimos, falta de compromiso social, necesidad de sobresalir criticando, más no proponiendo.

Lo que Guatemala necesita señores es compromiso, propuestas reales y realizables, solución a los problemas que nos están aniquilando, no seguir en el mismo esquema de destruir, más no construir, de dejar el egoísmo, de pensar en el prójimo como en nosotros mismos, de no perdernos en banalidades, y cimentar realidades. A QUIEN MENOS LE IMPORTA TANTA CRÍTICA ES A ARJONA, ÉL YA HIZO LO QUE TENÍA QUE HACER, NO LO HIZO EN GUATEMALA PORQUE LE CERRARON LAS PUERTAS, A LOS QUE DECIDIMOS QUEDARNOS NOS TOCA AFRONTAR Y ALLANAR EL CAMINO.