El gobierno de Ecuador respeta la división de poderes y ofrece plenas garantías a la oposición, dijo este jueves el ministro del Interior, Gustavo Larrea, haciendo un llamado a la calma por la crisis de poderes que llevó a la salida hacia Colombia de varios adversarios políticos.
Larrea desmintió una persecución oficial contra el grupo de opositores que huyó del país declarándose víctimas del gobierno del presidente Rafael Correa, a quien tildan de «dictador».
«Nosotros no perseguimos a los diputados, ellos aspiran a ir presos porque creen que de esa forma puedan hacer oposición (…) No hay un sólo preso político, no existe una orden de prisión contra ninguno de los diputados», declaró el funcionario al canal Teleamazonas.
El martes 11 políticos, que luchan por la restitución de sus curules en el Congreso, llegaron a Bogotá pidiendo protección luego de que una fiscal solicitara su arresto bajo sospecha de sedición. La medida aún está siendo evaluada por la justicia.
La queja de los opositores fue secundada por un pedido de asilo para seis de ellos por parte del Parlamento Latinoamericano, mientras la OEA sigue con atención la crisis originada en los planes de reforma constitucional de Correa, respaldados mayoritariamente en un plebiscito el 15 de abril.
El ministro de Interior insistió en que el Ejecutivo se opone al arresto de los políticos, al tiempo que rechazó las denuncias sobre una concentración de poder por parte de Correa, quien gobierna con una popularidad récord del 76% según encuestas.
«Deslindamos absolutamente responsabilidad (en la crisis). Somos plenamente respetuosos de la división de poderes, es más, consideramos un error judicializar la política y garantizamos plenamente el derecho a la oposición», señaló Larrea.
Asimismo, formuló un llamado a la tranquilidad bajo la garantía de que el gobierno «no quiere una pugna con la oposición y seguirá respetando sus derechos».
«A nosotros nos conviene bajar las tensiones; a nosotros nos conviene y queremos que en estos meses el país entre en un período de calma para poder ir a la Asamblea Constituyente en las mejores condiciones», comentó.
Los ecuatorianos elegirán el 30 de septiembre a 130 asambleístas que redactarán una nueva Carta Política que, según Correa, deberá reforzar el papel del Estado en la economía, recortar poderes al Congreso y despolitizar tribunales.