La NBA, que atraviesa un momento de gran popularidad gracias a la historia de Jeremy Lin, realiza su Juego de Estrellas el domingo en Orlando, y la atención vuelve desde el chico sensación de la temporada al astro local Dwight Howard.
Carmelo Anthony observó en Orlando una aglomeración de periodistas y de inmediato intuyó a quién rodeaban. Allá en Nueva York, sería Lin.
Pero estos días en Orlando, la atención regresa a donde estaba al comenzar la temporada, al futuro de Dwight Howard.
Eso significa que Howard recibe las mismas preguntas que persiguieron a Anthony el año pasado, poco antes de que fuera transferido.
«¡Gracias, Dwight!», gritó Anthony. «Ahora te toca a ti».
El pivote ya solicitó ser transferido, pero sigue en Orlando y no se sabe por cuánto tiempo. El Magic puede canjearlo durante el plazo de transferencias que vence el 15 de marzo o retenerlo toda la temporada y arriesgarse a perderlo sin conseguir nada a cambio en julio.
Howard no quiso decir nada del asunto el viernes.
«Todo lo demás puede esperar», atajó Howard. «Solamente quiero que la gente se divierta y disfrute. Esta es la semana del Juego de Estrellas. Este es un momento de celebración para los muchachos que han tenido una magnífica primera mitad (de temporada) y para los muchachos que nunca han visto esto».
La mesa de Howard estaba entre Anthony y LeBron James, dos de los astros más renombrados en la liga. Pero ninguno recibía ni por asomo la atención generada por él. Anthony estaba contento de cederle los reflectores después de que su situación empañó la celebración del año pasado en Los Ángeles.
«Me da gusto que ya no sea yo», dijo Anthony.
James pasó por el circo de la agencia libre en la temporada anterior, y admitió que también lo cansó.
«Sí, totalmente», dijo James. «Sé exactamente por lo que está pasando. Es una situación difícil de llevar. … Va a hacer lo que sea mejor para él».
Lin no fue olvidado, incluso después de que James y el Heat lo sumieron el jueves en su peor partido desde que surgió como la principal noticia en la NBA a principios de mes.
Howard fue consultado sobre si había algo que pudiera frenar al base, que fue jugador universitario de Harvard y llegó a la liga sin ser seleccionado en el draft.
«Bueno, no se ha enfrentado todavía a la Gran Muralla de Orlando», dijo Howard.
Un muro que se puede mudar de ciudad.
El Magic le permitió al representante de Howard que examinara un posible canje con los Nets, los Lakers y los Mavericks de Dallas.