McCartney se disfraza de bombero para soplar las 40 velitas del Album Blanco.
Dos días después del 40 aniversario de la edición del mítico ílbum Blanco de los Beatles, Paul McCartney publicó ayer «Electric Arguments», el tercer disco nacido de su colaboración con el productor Youth con el seudónimo de The Fireman («El Bombero»).
Los precedentes, «Strawberries Oceans Ships Forest» y «Rushes», databan de 1993 y 1998. El primero apareció de incógnito, hasta que la prensa reveló la identidad del dúo, formado por Sir Paul y Martin «Youth» Glover.
Ex bajo de Killing Joke, Youth, de 47 años de edad, es productor artístico y trabajó, entre otros, para el álbun «Urban Hymns» de The Verve en 1997 (con el exitoso tema «Bitter Sweet Symphony»).
Inicialmente, The Fireman era un proyecto experimental y sus dos primeros discos reunían temas electrónicos instrumentales.
Pese a la utilización de efectos sonoros inhabituales, el calificativo «experimental» es abusivo en el caso de «Electric Arguments», puesto que el dúo vuelve en él a un formato tradicional de canciones y McCartney, de 66 años, canta en él.
Lo que se oye lleva la marca inconfundible de McCartney, y de calidad.
El álbum se inicia con un título rock, «Nothing Too Much Just Out Of Sight», que evoca, en más lento, «Helter Skelter», un de los grandes temas del Album Blanco de los Beatles, de cuya aparición se cumplieron el sábado 40 años.
Melodista genial, el ex Beatle despliega luego toda la gama de sus talentos: suavidad acústica con «Two Magpies» y aire pop con «Sing The Changes» (que recuerda a su segundo conjunto, The Wings), «Sun Is Shining» o la bellísima «Dance «til We»re High».
«Lifelong Passion» es un encuentro de los ragas indios del fallecido George Harrison con el pop sintético de los alemanes de Kraftwerk (y particularmente el tema «Europe Endless»).
Después de la menos convincente «Is This Love?», el final del disco es más claramente experimental.
Cada uno de los trece temas fue escrito y grabado en un día, a lo largo de un periodo de un año.
McCartney confirma con este disco que está en plena forma artística, después del álbum en solo «Memory Almost Full» (2007), que pese a ser desigual contenía buenas canciones, y sobre todo el fantástico «Chaos And Creation In The Backyard» (2005), digno de figurar entre los clásicos.
Pese a ello, es sobre todo a raíz de los Beatles que se habla de él en los últimos tiempos.
El entusiasmo reina entre los fans del legendario conjunto desde que Paul anunció el 17 de noviembre que un tema inédito experimetal de 1967, «Carnival Of Light», podría publicarse. La operación requiere la autorización del otro Beatle vivo, Ringo Starr, y de las viudas de John Lennon y George Harrison.
Y el 40 aniversario del ílbum Blanco fue saludado incluso en el Vaticano, donde el diario L»Osservatore Romano le consagró un artículo elogioso y relativamente indulgente con la famosa frase de Lennon según al cual «los Beatles son más célebres que Jesucristo».