La vida está llena de secretos que muchos pasan desapercibidos, hoy es el 252º dí­a del año del calendario gregoriano y número 253 en los años bisiestos. Quedan 113 dí­as para finalizar el año y para hablar de números mejor conoceremos a Julio Mejí­a, quien lleva 60 años de estar rodeado de ellos, vendiendo números de la loterí­a.

Desde que la gasolina se vendí­a por botellones y la sexta avenida no era como ahora, según cuenta don Julio, comenzó a vender números de la loterí­a junto a su padre que le heredó el oficio, que él mismo ha acogido por varios años.

Muchos son los que creen en la numerologí­a utilizando los números para la suerte, o bien por simple relación con alguna fecha importante que utilizan para comprar números de las distintas loterí­as que actualmente sortean millones de quetzales.

Ya bastante tiempo ha logrado ofrecer números a las personas que quieren probar suerte y hoy es un buen dí­a para hacerlo porque se produce el código numérico 9/9/9. Por la sincronización del dí­a, el mes y la terminación del año 2009.

Si usted quiere intentar ganar con este número puede conocer a don Juan, para que le ayude a elegir su número, la agencia se encuentra en el Pasaje Rubio, local 48 sobre la sexta avenida y se llama «la casa de la suerte».

Eddy Coronado: ¿Qué número es el de la suerte?

Juan Mejí­a: Un 90 por ciento de aceptación, es el número siete.

E.C.: ¿Cómo se deciden por qué numero elegir?

J.M.: Para la escogencia de números hay muchos modos de pensar, hay quienes no les gustan los números repetidos y otros que no tenga cero en medio.

E.C.: ¿Cuáles son los más solicitados?

J.M.: La gente busca números que terminen en 7 o terminados en 21, que sumen 19 o que tengan 13.

E.C.: ¿Cómo calculan para elegir algún número?

J.M.: Tengo una estadí­stica de los números que han sido ganadores y, el siete y el cero tienen mayor porcentaje, aunque en todos los números ha caí­do y la tabla lo demuestra. En el próximo sorteo va a jugar el nueve porque mucha gente está buscando ese número.

E.C.: ¿Hace cuánto tiempo vende números?

J.M.: Tengo 60 años de estar vendiendo números para la suerte.

E.C.: ¿Cuántos años tiene?

Tengo 80 años de edad, tengo una foto de 1950 donde estoy junto a mi padre que fue el que comenzó con el negocio.

E.C.: ¿Cuáles son los dí­as en que mejor se vende?

J.M.: Los dí­as lunes, el sorteo se juega el dí­a sábado y el domingo todos miran en la prensa, entonces el lunes todos cambian los premios porque les urge la plata.

E.C.: ¿Para cuántas loterí­as ha trabajado?

J.M.: Para todas las que han habido y por haber, hasta que me alcance la vida.

E.C.: ¿Cuál fue la primera loterí­a?

J.M.: La loterí­a del hospicio que luego se transformó en la loterí­a nacional, el hospicio era una entidad donde llevaban a los niños huérfanos y los fondos que recaudaban eran para ayudarlos.

E.C.: ¿Cuánto costó el primer número de la loterí­a?

J.M.: Primero costó diez centavos, luego costó 20. El mí­nimo fue de 10 centavos, después hicieron pedacitos de 50 centavos y 5 quetzales el entero.

E.C.: ¿De cuánto es la diferencia?

J.M.: Es mucha, a partir de hoy sacan el número que cuesta Q300 el entero y Q30 el pedacito que serán para los Q6 millones que se sortearán en enero.

E.C.: ¿Cuánto dinero se sortea?

J.M.: Q570 mil son semanales,

Q1 millón 200 mil, una vez al mes,

Q3 millones cada seis meses,

Q6 millones una vez al año.

E.C.: ¿Qué loterí­a vende más?

J.M.: La Santa Lucí­a, porque es la más grande y la de más credibilidad, tiene 53 años de haber sido fundada.

E.C.: ¿Cuántos hijos tiene?

J.M.: Tuve ocho, pero ahorita tengo 6 hijos, porque dos fallecieron lamentablemente.

E.C.: ¿Y su familia de cuántas personas es?

J.M.: En diciembre ajusto ocho nietos, ocho bisnietos y en total tuve ocho hijos; estoy pensando buscar un número que tenga ochos para probar suerte, porque también tengo 80 años.

E.C.: ¿Qué tal las ventas?

J.M.: Hay dí­as buenos y malos en los que perdemos y nos hace falta.

E.C.: ¿En su tiempo libre qué le gusta hacer?

J.M.: Coleccionar sellos y figuras de deportes, especialmente de pesas porque fui directivo de la confederación de pesas y del colegio de árbitros.